-¿Cómo se embarca la Fundación EME, que usted preside, en el proyecto de interpretar la obra de Händel, "El Mesías" en castellano?

-Originalmente es en inglés, pero la primera versión es la que arregla Mozart y que se populariza en los territorios alemanes. No obstante, hasta después de la Segunda Guerra Mundial no se recupera la versión original. En español existen varias versiones. En la visita de Juan Pablo II a Cuba interpretaron como bienvenida un macro Mesías con una traducción en castellano hecha desde la Conferencia Episcopal de Cuba y una de las personas que participa en aquel evento es Sara Rodríguez, la directora coral de esta versión. La idea de "El Mesías" la habíamos hablado en varias ocasiones y como esta Navidad se cumplen 275 del estreno de la obra, me pareció un momento para tocarlo.

-¿Qué versión realizan?

-No utilizamos ninguna oficiosa que circula por América Latina ni la versión que se cantó en Cuba. Sara se acordaba de algunos detalles y a partir de ahí hemos reelaborado y adaptado a los giros lingüísticos de España. Además, hemos intentado respetar lo que decía el texto original en inglés, lo hemos cotejado con las formas de la Biblia y hemos optado por un castellano culto para darle cierta reminiscencia antigua. Lo más complicado ha sido comparar las traducciones literales y a partir de ahí ir encajando con la música.

-Sobre el escenario del Teatro Ramos Carrión estarán unas 150 personas.

-La parte instrumental corre a cargo de la Joven Orquesta Sinfónica de Valladolid, que la integran unos 75 componentes, estudiantes de 13 a 25 años de Valladolid y del resto de Castilla y León, mientras que la parte vocal la desarrollan tres corales de Valladolid: la Coral Vallisoletana, la Coral Fuente Berrocal y el Coro Animus Vocal a los que se suman las voces de los solitas, Eugenia Enguita, soprano; Beatriz Gimeno, contraalto; y David Gascón, barítono.

-Son muchas personas implicadas en el espectáculo. ¿Cuál ha sido la mayor dificultad?

-Que los coros se acostumbren a cantar la pieza en castellano porque parte de la obra la había cantado en inglés, alemán o incluso en latín. En el sentido musical, se trata de una obra más.

-Para la Fundación EME que usted preside ¿qué supone la interpretación de este célebre oratorio?

-Es un proyecto que ha implicado a muchas personas. Esta obra es el tipo de oratorio barroco que se ha popularizado mucho porque era voluntad del propio Händel que fuera un poco una reunión de la cristiandad cantando a Dios.

-Esta filosofía se ha retomado en los últimos años.

-En este país se ha empezado hace varios lustros porque no es un oratorio de nuestra tradición, porque se asocia a la música protestante y porque se canta más en inglés.

-El próximo año la Joven Orquesta de Valladolid cumple 15 años ¿encaran algún proyecto de enjundia para esta efeméride?

-Para este aniversario tenemos muchos proyectos en la cabeza y llevaremos a cabo una programación especial. Entre mis deseos a largo plazo está el hacer la novena sinfonía de Beethoven en castellano.

-En Zamora dirige un concierto de Año Nuevo a cargo de la Orquesta Filarmónica de Valladolid.

-El concierto de Año Nuevo lo pusimos en marcha en Valladolid en 2010 con el nombre de "De Viena a Valladolid". Al principio, pensaban que estaba loco y en pocos años se ha convertido en un evento de referencia. El pasado año hicimos "De Viena a Palencia" y este año ponemos en marcha de "De Viena a Zamora". El concierto de Año Nuevo ha entrado en nuestras casas a través de la televisión y la radio gracias, en buena medida, a Fernando Argenta. Además, estos conciertos suponen una manera de que la gente pierda miedo a la música clásica. Nosotros hacemos un calco al de Viena no solo en el programa, sino en la ambientación y la estética adaptada a lo español, de tal forma que en Austria en el descanso se toma de vino del Rin y salmón mientras que en Zamora se beberá vino de Toro y queso zamorano.

-¿Por qué todavía existe cierto rechazo a la música clásica?

-Creo que forma parte de nuestra idiosincrasia. España ha tenido la suerte de tener los mejores pintores y escritores de la historia que han sido los cimientos artísticos de nuestra nación. En España la música no ha cuajado como en otros países como Italia o Alemania donde está asociada a sus estados modernos. En los últimos años la música ha avanzado mucho, cada vez tiene más peso, en nuestro país, en buena medida gracias a la reina Sofía, y España tiene músicos de altísimo nivel, muchos de los cuales trabajan en orquestas en el extranjero.