El kilómetro 301 de la carretera N-630 a su paso por Peleas de Arriba es el tramo de carretera más peligroso de toda la provincia de Zamora. Así lo atestigua el último informe de la organización Automovilistas Europeos Asociados (AEA), que constata que, a pesar de que la vía soporta una intensidad media diaria de apenas 267 vehículos, es el punto del territorio zamorano donde más accidentes con víctimas se registran. Zamora es, no obstante, la provincia de Castilla y León donde existen menos puntos negros señalados por esta organización. Salamanca, con trece tramos repartidos entre las N-501, N-620, y N-630, se sitúa a la cabeza, por delante de León con ocho, de los que cuatro están ubicados en la N-6 y el resto en la N-536, N-625 y N-621. En Burgos son cinco los tramos, cuatro en la N-232 y uno en la N-210, y en Ávila, cuatro, tres en la N-502 y uno en la N-501. En el lado contrario se sitúan Segovia (N-110) y Zamora (N-630), ambas con un tramo, seguidas de Soria con dos (N-110 y N-122); Palencia, con tres, (N-120, N-611 y N-622), y Valladolid con cuatro (N-122, N-620 y N-601).

El informe de la AEA se apunta que a pesar de haberse mantenido estable el indice de peligrosidad medio de las carreteras españolas, han aumentado los tramos en los que se supera en más de diez veces la media nacional. Así, en el informe del año pasado aparecieron 140 puntos frente a los 190 localizados este año, mientras que en Castilla y León pasa de 29 a 41. Este hecho evidencia, en opinión de AEA, que "la reducción presupuestaria destinada al mantenimiento de las carreteras está afectando negativamente a la seguridad vial de nuestro país". En este sentido, desde la AEA se advierte que si mantienen los recortes presupuestarios en la conservación de la red de carreteras, se puede producir un "indeseado" repunte de la siniestralidad.