Las arcas municipales dejan de ingresar cada año 360.000 euros en concepto de Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) correspondientes a las propiedades de la Iglesia. Las bonificaciones fiscales que a día de hoy mantiene el catolicismo, dadas por las leyes estatales y el concordato, suponen una merma importante de las capacidades económicas de los ayuntamientos, a quienes nadie compensa por este dinero que queda en el limbo. El Estado tan solo abona el IBI correspondiente a los colegios concertados dependientes de la Iglesia, pero no entran en el lote el resto de propiedades: templos, viviendas, garajes... Un montante que queda al margen de la tributación y del que el Ayuntamiento de Zamora exige ahora el reintegro: el equipo de Gobierno quiere que el Estado compense esos 360.000 euros que cada año se están perdiendo por los acuerdos con la Iglesia Católica.

El Estado ha ingresado recientemente en el Ayuntamiento de Zamora 73.000 euros en concepto de IBI por los colegios concertados existentes en la capital. Lo hace Madrid, directamente, puesto que la Iglesia está exenta de pagar este impuesto merced a la Ley de Mecenazgo de 2002 y los acuerdos del concordato. "Siguiendo este criterio, de no modificarse la Ley, creemos que lo mismo debería aplicarse al resto de propiedades de la Iglesia Católica en Zamora", apunta Francisco Guarido. Pero no es así. De hecho, la capital pierde 360.000 euros anuales en este concepto. Y las propiedades eclesiásticas no son pocas a lo largo y ancho de la ciudad.

La treintena de templos que se despliegan por los diferentes barrios de la capital, así como los inmuebles destinados al culto, se acogen a los Acuerdos con la Santa Sede derivados del concordato para no pagar impuestos. A ello hay que sumar los centros de enseñanza, exentos por la Ley de Haciendas Locales y que, en este caso, sí se reintegra por parte del Estado. Y, por último, aparecen más de un centenar de propiedades entre edificios, viviendas o garajes -por citar tres ejemplos- que se acogen a la Ley de Mecenazgo de 2002 para no tributar este IBI. En total, esos casi 400.000 euros que nunca llegan a las arcas municipales.

Ante esta situación, el equipo de Gobierno capitaneado por Francisco Guarido considera que es momento de que, bien la Iglesia, bien el Estado, alguien, se haga cargo de esa factura impagada por parte del clero para que revierta en todos los zamoranos. "Las leyes están para cumplirlas, pero por eso le pedimos al Gobierno que cambie la Ley", explica el regidor.

Cabe destacar que la lista de beneficiados por la Ley de Mecenazgo del año 2002 no incluye solamente a la iglesia, sino también a toda aquella entidad sin ánimo de lucro que se beneficia de la exención del pago del IBI. Una situación que, a juicio de este Ayuntamiento, debe de cambiar en el futuro.