Numerosos casos de abandonos de gatos dan lugar a colonias en las ciudades que con el tiempo incrementan la cantidad de individuos. Algunos voluntarios animalistas dedican un gasto económico a la esterilización de algunos miembros, también supone un coste para las administraciones que tienen que dedicar sus recursos a la solución del problema. Sin embargo, estas actúan ante las consecuencias, pero no tratan de erradicar las causas, "las instituciones ayudan pero no atienden a la raíz de la problemática. Son necesarias leyes como la esterilización obligatoria, que reducirían el número de abandonos y además garantiza una mejor salud y seguridad del animal", reivindica Miriam García.

Desde DAZ, reclaman penas que incluyan la inhabilitación en la tenencia de animales en situaciones de maltrato, algo que la Asociación ha conseguido una vez.

Además, una reciente modificación en el Código Penal permite condenas más severas en el abandono de camadas, pues aborda el delito de forma independiente para cada animal.