El número de sentencias que dicta el magistrado titular del Juzgado de Menores es casi cinco veces menor que el que asume su compañera del Juzgado de lo Penal, a la que tendrá que ayudar a partir de septiembre en la celebración de juicios e imposición de sentencias. En 2013, el juez de Menores puso 106 sentencias y 41 autos, año que marcó la tendencia a la baja, de modo que, en 2014 fueron 91 fallos que dictó y 11, los autos; en 2015, 67 y 20, respectivamente, de acuerdo con la última estadística.

En el Juzgado de lo Penal también se experimentado un descenso importantes de asuntos acumulados, al pasar de los cerca de 600 procedimientos que estaban pendientes de fecha de juicio en 2011 a los actuales 150 causas por resolver con sentencia. Los dos últimos años se han cerrado con menos de 500 asuntos, entre 480 y 520, muy por debajo de los 700 que soportaba el órgano judicial entre los años 2009 y 2011. El control sobre la ejecución de las sentencias y autos judiciales, otro de los problemas que generan atasco en Penal, no ha aumentado en exceso, al sumar unas 600 causas, una cantidad que "puede ser manejable para la plantilla", según indicó el presidente del Tribunal Superior de Justicia en su inspección.