El juez de Menores tendrá que asumir, finalmente, las labores de refuerzo al Juzgado de lo Penal a partir de septiembre y aunque el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, José Luis Concepción, aseguró en mayo que tales funciones se las enconmendarían a jueces que han aprobado la oposición pero sin plaza de titular.
En ese mismo mes, el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), órgano de gobierno de los jueces, decidió reforzar los juzgados con mayor atasco con magistrados de Menores, órganos creados en 2001, con mucha menor carga que el resto, especialmente en Zamora, donde esta instancia recibe menos de 300 asuntos anuales, ya desde 2013, y dicta poco debajo de las 100 resoluciones cada ejercicio, frente a las casi 500 del Juzgado de lo Penal.
El juzgado de Menores no cumplen, pues, con los 550 módulos de trabajo (parámetro que mide el volumen de ocupación) por juez y año establecidos por el CGPJ, mínimos para que la justicia sea ágil. La decisión del Consejo ya levantó en armas a los magistrados de Menores que se han unido para recurrir la decisión y están a la espera de lo que se resuelva. El magistrado de Menores de Zamora celebrará juicios en Penal una vez al mes, un miércoles, para poner sentencias y se encargará de parte de las ejecutorias, según lo acordado.
Aunque el juez y funcionarios designados durante dos años y medio para reforzar al Juzgado de lo Penal de Zamora consiguieron descongestionar este órganos judicial y de que Concepción manifestó, tras inspeccionarlo en mayo, que "ha superado, ahora mismo y por fortuna, la etapa" de colapso que exigía crear un segundo juzgado, lo cierto es que la magistrada necesita ayuda para resolver todos los casos que le llegan en un tiempo adecuado.
El ligerísimo descenso de asuntos ha contribuido a mejorar la situación no es suficiente para evitar la congestión, si no se mantienen en esos niveles, explicó Concepción.
El máximo responsable del TSJ tuvo palabras de reconocimiento para la juez titular, Belén Gamazo, y para los funcionarios por el esfuerzo que realizan para mantener el Juzgado lo más al día posible, con la celebración de juicios dos día por semana, entre 15 y 20 cada jornada. Esa entrega, además del juez de refuerzo que hubo, explica que el un número de causas que a resolver sea "asequible y normal" en la actualidad, explicó el presidente del TSJ. En esas fechas, consideraba imprescindible continuar con la funcionaria y el secretario de apoyo que aún permanecían en activo. A paritr de septiembre, la funcionaria continúa, junto al juez, pero el secretario ya no.
