Zamora revalida su capacidad logística como ciudad de congresos tras la clausura ayer de las jornadas de licenciados y doctores españoles en Estados Unidos, que ha reunido en la capital durante cuatro días a profesores universitarios residentes en Norteamérica.

La celebración del congreso "Diáspora española: migración y exilios" en la Fundación Rei Afonso Henriques permitirá que "Zamora pueda ser conocida y promocionada en un país tan grande como Estados Unidos a través de los profesores universitarios españoles, que tienen la capacidad de divulgar entre sus alumnos las bondades de la ciudad", explica el secretario general de la FRAH, José Luis González Prada, a modo de balance del congreso. A su vez, el casi centenar de participantes ha generado un movimiento económico en la ciudad, a lo que se suma "la competencia de los asuntos que han tratado, muy interesantes para abordar el fenómeno de la migración", expone el responsable del órgano hispanoluso. Estas tres condiciones -promoción de Zamora, generación de economía y el tema de fondo en sí- llevaron al patronato de la FRAH a trabajar durante más de dos años para materializar un congreso que el pasado año se celebró en Manhattan.

El secretario general del órgano transfronterizo confía en que el congreso posibilite un "efecto multiplicador" desde el punto de vista turístico por parte de los universitarios a los que enseñan los académicos y, a su vez, potenciar Zamora como destino idiomático.

La valoración de los asistentes que han recalado en Zamora ha sido "muy positiva" y González Prada no oculta su satisfacción por el hecho de que "se hayan sentido muy cómodos en la FRAH como espacio para la reflexión y punto de encuentro de experiencias, opiniones y valoraciones". El proyecto ratifica aún más la próxima puesta de largo de nuevos congresos de dimensión internacional que podrán celebrarse a corto plazo, "alguno de ellos, este mismo año", adelanta González Prada. El responsable se muestra convencido de que, fruto del trabajo bien hecho, Zamora se situará "a la vanguardia" de un tipo de congresos medios, "no mayoritarios para acoger a 300 y 400 personas, pero sí para dar cabida a 90 o 100 participantes como en esta ocasión", sopesa.