Cuatro décadas de promoción, divulgación y estudio para recuperar la memoria histórica de la presencia de los judíos en la provincia han servido de caldo de cultivo merecedor de la medalla de las Cuatro Sinagogas de Israel en reconocimiento a esa labor prolongada. La insignia fue recibida ayer por la presidenta de la Diputación, Mayte Martín Pozo, en nombre de toda la provincia -capital incluida- en el marco del quinto congreso sobre la herencia judía celebrado estos días en Zamora.

La medalla conmemora las cuatro sinagogas sefarditas en el barrio judío de la ciudad vieja de Jerusalén construidas entre los siglos XVI y XVIII, cuatro edificaciones relacionadas entre sí durante siglos que constituían el corazón de la comunidad, la más veterana y numerosa con 750 años de existencia. La pieza, acuñada por la Sociedad Estatal Israelí de Medallas y Monedas, se entrega por primera vez a una institución. El último en recogerla fue el propio presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, si bien antes lo hicieron Juan Carlos I, el rey Felipe VI así como otros exministros y expresidentes. "Presidenta, entra en un buen club de grandes personalidades", planteó ayer Abrahám Haim, presidente de la comunidad, a Mayte Martín Pozo durante la entrega de la medalla en el salón de plenos de la institución provincial. Al acto de entrega asistieron también el director del centro Campantón, Jesús Jambrina, así como el diputado de Cultura, José Luis Bermúdez, y el concejal de Turismo, Christoph Strieder.

Martín Pozo recogió la medalla y reconoció el papel de anteriores alcaldes y presidentes de la Diputación en el trabajo de recuperación de la memoria sefardí: "Recojo el testigo y seguiremos adelante con esta labor", explicó, sin pasar por alto las referencias históricas al pasado judío de Zamora "desde el siglo XIII". En la misma línea, este compromiso fue respaldado por Strieder, quien aseguró que "haremos el esfuerzo necesario para hacer presente este pasado de la ciudad". En este sentido, esta medalla "debe de servirnos como imperativo de trabajo riguroso e intenso en la recuperación de la memoria histórica sefardí de un grupo que pertenece a la historia de nuestra ciudad".

El germen de este proceso de décadas que ha derivado en la concesión de las medallas está en un congreso organizado por la Fundación Ramos de Castro en el año 1981 bajo el título "La España olvidada: los judíos". La jornada fue "la piedra angular de todo", explicó Haim. A ello se suman otros congresos, publicaciones y seminarios, como los organizados por el zamorano Leandro Rodríguez, "pionero en desarrollar la filosofía de que Cervantes es de Sanabria", añadió el presidente del Consejo de la Comunidad Sefardí en Jerusalén.

El acto oficial está enmarcado en el quinto congreso sefardí celebrado en Zamora durante estos días y que fue clausurado ayer con el broche de oro de la entrega de la medalla hebrea. Los participantes de las jornadas asistieron al acto celebrado en el salón de plenos de la Diputación Provincial de Zamora, donde el propio Haim reprodujo la carta oficial enviada hace varias semanas a la presidenta de la Diputación para comunicar la concesión de la medalla a la institución a propuesta del centro Isaac Campantón.