El folclore zamorano ha bajado el telón por vacaciones hasta el próximo curso. Las aulas de baile de los grupos Don Sancho y Doña Urraca clausuraron ayer su actividad con sendas actuaciones celebradas en los colegios Jacinto Benavente y Obispo Nieto. Una cita que sirvió para despedir estos nueve meses de actividad que han dado para algo más que el aprendizaje.
El grupo Doña Urraca utilizó el patio del colegio del Jacinto Benavente para realizar su muestra. Una actuación que contó con nueve grupos de niños (desde los 4 hasta los 16 años) junto con cuatro grupos de adultos y otros tres grupos de clase de pandereta. En total, más de dos centenares de alumnos fueron los encargados de mostrar al público todo lo aprendido durante el curso que ahora finaliza.
Ruedas, jotas, charros y brincaos de todas y cada una de las comarcas de la provincia de Zamora fueron parte del gran repertorio preparado por Doña Urraca. Un despliegue que estuvo acompañado por trajes regionales propios o que el grupo prestó para las actuaciones y que se confeccionan en las clases de costura que se imparten en la escuela.
El grupo Don Sancho, por su parte, se hizo con el patio del colegio Obispo Nieto para ofrecer su muestra de folklore con más de 150 alumnos de la escuela. Un recital en el que enseñaron al público lo aprendido durante estos meses en los diferentes cursos de baile, canto, pandereta o costura y que ha estado aderezado con el conocimiento de la cultura popular de las diferentes comarcas de la provincia de Zamora.
Cada uno de los grupos seleccionó dos piezas que han aprendido durante el curso para mostrarlas ante el gran público que, a pesar del calor, respondió como habitualmente hace.
Tanto Don Sancho como Doña Urraca regresarán a la actividad a partir del próximo septiembre con la apertura de las inscripciones de cara al nuevo curso. Mientras tanto, los alumnos que no quieren dejar morir el folklore de Zamora tendrán tiempo para unas vacaciones más que merecidas.
