El alcalde, Francisco Guarido, ha hecho un balance "en positivo" de los dos primeros años de mandato en bipartito entre IU y PSOE. Un tiempo en el que, considera, se ha trabajado en "el engranaje" de la maquinaria del Ayuntamiento de Zamora, pero que también ha dejado espacio para avanzar en proyectos vitales para la ciudad de Zamora. La portavoz popular, Clara San Damián, enumeró una serie de iniciativas que, a su juicio, están en punto muerto desde el año 2015. Unas afirmaciones que en la intervención final del Pleno, Guarido quiso desmentir. "Por primera vez existe un anteproyecto para el Mercado de Abastos; el parque de bomberos está en proyecto; el Plan General de Ordenación Urbana será modificado con la colaboración, que ya es un hecho, de los agricultores; se han solucionado conflictos laborales con la Policía Municipal y el Cuerpo de Bomberos; el proyecto del antiguo matadero, después de 13 años en el cajón, por fin está en Urbanismo; y ya se ha realizado una consulta para comprobar la viabilidad del futuro Museo de Semana Santa, algo que nunca antes se había realizado", afirmó.

Las críticas de la oposición a la gestión de Guarido fueron encaminadas a la lentitud de sus iniciativas. Un guante que recogió el alcalde durante su intervención. "Es verdad que las cosas han ido lentas. Aceptamos que los contratos, por ejemplo, podrían ir más deprisa, pero se van haciendo", explicó el regidor. "También tenemos mucho que mejorar en materia de turismo y lo aceptamos, pero ahora es el turno para los grandes proyectos. Las contrataciones del nuevo plan de emplea nos permitirán contar con profesionales para avanzar en la redacción de estos proyectos que deberán llegar en los dos años que nos restan de mandato", concluyó Francisco Guarido.