José María Barrios es desde ayer nuevo presidente del Partido Popular de Zamora, un cargo en el que releva a Fernando Martínez Maíllo, que lo ocupaba desde el año 2004. Barrios quedó oficialmente "ungido" en el decimotercer Congreso Provincial del partido, celebrado en el Ramos Carrión y que contó con la asistencia de aproximadamente medio millar de afiliados. Como estaba anunciado, el presidente estará acompañado de Mayte Martín Pozo como secretaria general de la formación. Martín Pozo era ya de forma oficiosa la número dos del PP, nombrada por Maíllo cuando este adquirió responsabilidades nacionales en el partido. Ahora pasa de coordinadora general a la secretaría, puesto que hasta hace escasas fechas estaba ocupado por Alberto Castro, cuya marcha de la dirección provincial del partido se hizo ayer más oficial si cabe de lo que ya era.

Tras ser elegido, las palabras de José María Barrios fueron básicamente de agradecimiento. Recordó el ya presidente de los populares zamoranos Pilar Álvarez, expresidenta de la Diputación, y a Dionisio García Canero, presidente del partido cuando Barrios se afilió a la formación. Y recordó también, más efusivamente, a Fernando Martínez Maíllo, a quien consideró "su mentor" en política y del que ensalzó "su talento", como muestra, dijo, su ascenso en el organigrama nacional del partido. "Compartimos la alegría contigo", zanjó.

Fue precisamente Martínez Maíllo, centro de casi todas las miradas durante la mañana de ayer, el encargado de poner punto y final a un congreso en el que los populares zamoranos hicieron gala de la "unidad" que, a su juicio, falta en otras formaciones políticas, mención especial para el PSOE. El discurso de Maíllo tuvo dos claras vertientes, la primera como coordinador general del partido y la segunda como ya expresidente del PP de Zamora.

En la primera parte Maíllo puso en valor los Presupuestos Generales del Estado aprobados esta misma semana en el Congreso de los Diputados y atacó a quienes "no los querían aprobar pensando que hacían daño al PP. En realidad, hacían daño a España", aseguró Martínez Maíllo. El coordinador subrayó además que los populares "sabemos gobernar en minoría", como a su entender demuestran los pactos alcanzados para la aprobación de las cuentas estatales con "otras seis formaciones políticas".

Duras palabras hubo para la moción de censura planteada por Podemos y para los mandatarios del gobierno catalán. Para los primeros, porque "saben que no saldrá adelante" y porque "lo que está realmente en juego es una lucha para ver quién lidera la oposición al PP y a Mariano Rajoy. Son sus propios intereses. ¿Y España para cuándo?", se preguntó el expresidente de los populares entre aplausos del auditorio. Para el gobierno catalán, críticas por sus "provocaciones", a las que el Gobierno del país "no va a entrar. Diálogo sí, pero chantaje no", zanjó. "Que venga a la sede de la soberanía nacional", dijo Maíllo en referencia a Puigdemont, "para debatir y escuchar las ideas de los que no pensamos como él. El PP siempre defenderá la soberanía de los españoles, la igualdad y la unidad de España", apuntó.

Como despedida, Maíllo agradeció a García Carnero la apuesta que hizo por él en 2004, cuando comenzó a presidir el partido, y tendió la mano al nuevo presidente. "Estaré a tu disposición, pero tú eres el presidente, el que tiene la autoridad y la legitimidad", remató.