La Agencia Tributaria sigue adelante con la subasta de la finca y vivienda de Ramón Álvarez y su familia, el agricultor toresano que lleva en huelga de hambre desde el pasado viernes para intentar paralizar el proceso. Así lo ha asegurado hoy Enrique Cortés, de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, al poco de regresar de una reunión mantenida en las dependencias de la agencia en Valladolid. “Nos dicen que es imposible parar la subasta y que se va a llevar a cabo mañana”, apostilla.

La única salida, indican las mismas fuentes, es que la subasta quede desierta para, en el plazo de unos meses, encontrar otras vías de pago que permitan a Álvarez y su familia saldar la deuda con la Agencia Tributaria, una deuda que supera los 100.000 euros.

Desde la Plataforma de Afectados por la Hipoteca piden a todos los posibles interesados que desistan de pujar por la finca para “no aprovecharse ni especular con las desgracias ajenas”. Además, la familia ha anunciado que no está dispuesta a abandonar la finca por lo que, de haber comprador, se tendrá que iniciar un procedimiento de desahucio que puede durar, según la PAH, “años”.

La familia, que tiene intención de pagar la deuda, ha ofrecido algunas alternativas a la Agencia Tributaria, como pasar el piso de su hija a nombre de la madre para así cumplir con sus obligaciones. Sin embargo, “Hacienda nos dice que no le interesan las propiedades, solo el dinero”, razón por la cual “solo les interesa la subasta” y, en caso de que quede desierta, “habría que vender dicho piso para conseguir dinero y pagar la deuda, algo que no se puede hacer de un día para otro”.