"No hace falta recibir el dinero" de la venta de las 802 participaciones de la empresa de Sol Sayago, del grupo Pevafersa, que figuraban en el contrato firmado por José Bahamonde, exjefe de Industria, para que exista el delito de cohecho, explicó ayer al jurado popular en el juicio de la Audiencia Provincial por la trama solar el fiscal jefe, Rafael de Vega Irañeta. Basta con que, siendo funcionario, sin pedir excedencia en la Junta de Castilla y León, aceptara y firmara el 10 de octubre de 2006 la oferta del expresidente de Pevafersa, Vicente Fernández Manso, y su hermana Juliana, afirmó. "El beneficio es lícito" en los negocios, apuntó el fiscal, "pero no lo es que alguien se aproveche de su cargo, se interponga en sociedades y, ayudado de esas, obtenga un beneficio".

En el caso de Bahamonde, "a través de Iniciativas Renovables", sociedad fotovoltaica constituida por su hijo, Javier Bahamonde, y su amiga, Blanca Blanco, en el despacho de Bahamonde Abogados, sociedad que compró participaciones por un euro de Sol Sayago y las vendió por mil.

En el caso del exjefe de Distribución de Iberdrola, Agustín de la Fuente, otro imputado por firmar el contrato de 2006 de Sol Sayago para adquirir 302 participaciones, encargado de autorizar los enganches de los huertos solares a los puntos de luz, habría obtenido ingresos "a través de Macageo", sociedad fotovoltaica formada por su esposa y sus hijos, con domicilio social en el mismo despacho de Bahamode Abogados. La defensa insistió en que el contrato, en el que se especifican las participaciones que ambos comprarían por un euro, pretendía captar técnicos cualificados para Pevafersa, nunca el tráfico de influencias, mientras que el fiscal hablaba de una prueba "clara, evidente y diáfana" de la existencia de los delitos que imputa. Una visión que no compartió el abogado de la defensa, Javier Gómez de Liaño, que criticó duramente al fiscal e indicó que "la verdad no se puede construir a cualquier precio, no todo vale", solo "había sospechas", y reiteró que el contrato se había robado, lo que negó en el juicio el expresidente de Pevafersa, Antonio Berdión, quien lo entregó a Fiscalía.

El fiscal volvió a recordar los 24 millones de euros por los que vendieron un huerto solar, llave en mano (con todos los trámites administrativos, la autorización y el enganche a Iberdrola), que les rentó un 5% de la cantidad, además de los 779.000 euros de beneficios que Sol Sayago obtuvo en 2008, cuando ya participaban de la empresa.

Es por eso que el fiscal jefe modificó sus conclusiones para pedir al jurado que, de no considerar el delito de tráfico de influencias que exige para Javier Bahamonde, Blanca Blanco, De la Fuente y Fernández Manso, por el que pide un año de prisión a cada uno y el pago del doble del beneficio obtenido, consideren culpables a los cinco imputados del delito de negociaciones prohibidas a funcionarios, como colaboradores necesarios del Industria, para el que exige una condena por tal delito. Las penas que pide son multas de 18.000 euros para el excargo de la Junta y de 7.200 euros para el resto; y tres años de inhabilitación para cargo o empleo público para el excargo de Industria; y de un año y seis meses, para el resto. La defensa insistió en la invalidez del contrato para pedir la absolución, "fue papel mojado, lo rompieron a los tres días y no se transmitieron las acciones, no fueron socios, no se elevó a escritura pública".

De Vega abundó en que "el Código Penal castiga al funcionario que acepta algo", las participaciones de una instalación que él debe autorizar por su cargo público, "vulnera el deber de imparcialidad como funcionario público" e insistió en que Bahamonde y De la Fuente sabían lo que firman, "más cuando son altos cargos" de la Junta e Iberdrola: "Bahamonde con más de 40 años de servicio y De la Fuente, en Chile, donde firma multitud de contratos".

Los delitos se han cometido porque "todos se conocen, todos quieren participar" del negocio y, una vez firmado el contrato que puede causar problemas a los cargos de Industria e Iberdrola, "tienen que hacerlo desaparecer de la circulación y se nos dice que a los tres días lo rompen". Pero "¿por qué lo conserva Juliana que llamó al resto para que lo rompiera?", en cuyo despacho apareció en 2009, y otro de los firmantes hasta 2007. La Fiscalía volvió a su tesis del plan por el que Pevafersa contrata en julio de 2006 al hijo de Bahamonde como asesor jurídico del grupo, después se firma el contrato para Sol Sayago; un año más tarde se anula para "que no nos pillen" y se crean todas las sociedades en Bahamonde Abogados.

Los abogados de la defensa, Dolores Márquez y Javier Gómez de Liaño, hicieron gala de su amistad con los cinco imputados, a los que defienden "convencidos de que son inocentes", indicó la letrada para negar "un plan urdido para aprovecharse" de los cargos de Bahamonde y De la Fuente en Industria y la Junta. Los otros tres imputados "no pidieron trato de favor porque no podían", el procedimiento de autorización de los huertos solares "era tan reglado que era imposible. Se ajustaron a la legalidad".

El fiscal jefe, Rafael de Vega Irañeta

  • Cohecho. José Bahamonde, «la persona que tenía que autorizar la instalación de huertos solares, funcionario, acepta el 10 de octubre de 2006 el ofrecimiento del contrato de compraventa de participaciones en Sol Sayago» (802). «Era jefe de Industria y autoriza, no se abstuvo. Este es en sí el delito». Negociaciones prohibidas a funcionarios. El exjefe de Industria «se aprovecha de su cargo para obtener beneficios y él participa de forma indirecta a través de su hijo», Javier, y su compañera sentimental», Blanca Blanco, que entran unos meses después en Sol Sayago con Iniciativas Renovables, creada en Bahamonde Abogados. El mismo delito pidió ayer que se aplique a los cuatro imputados restantes si el jurado no cree probado el tráfico de influencias.Tráfico de influencias. Se deja influir por Vicente Fernández para autorizar sociedades de Pevafersa; por su hijo y Blanca Blanco, y el jefe de Iberdrola, Agustín de la Fuente, todos con participaciones de Sol Sayago.

Dolores Márquez, defensa

  • Un trámite preceptivo. El jefe de Industria, «José Bahamonde no se abstuvo en la autorización de la fotovoltaica Sol Sayago porque era un trámite preceptivo, tan reglado que era imposible pasar un trámite sin el anterior». En Industria solo se daban cuatro pasos, la veintena restante era competencia de otros departamentos. Registro Mercantil. El contrato nunca se elevó a escritura pública, no figura en el Registro Mercantil y ningún documento confirma que el exjefe de Industria y el jefe de Iberdrola, Agustín de la Fuente, fueran socios de Sol Sayago. Desde Iniciativas Renovables, de Javier Bahamonde y Blanca Blanco, y Macageo, de la familia de De la Fuente, «no se solicitan parques solares».Delito imposible. Para la abogada no hay delitos porque ni Bahamonde ni De la Fuente podían hacer nada, estaríamos ante «un delito imposible, como matar a alguien con un conjuro».

Javier Gómez de Liaño, defensa

  • Imputaciones imaginarias. Para el abogado las imputaciones del fiscal a los cinco acusados «son imaginarias», «fruto de un error, cuando no de una acusación gratuita». Javier Gómez de Liaño, que recordó su infancia en Zamora, sus lazos afectivos con José Bahamonde desde la infancia y ahora con todos los procesados.Pasión y razón. «La justicia es una pasión. El fiscal ha puesto todo su celo profesional en este asunto, pero a veces la pasión nos oculta la razón». Desautorizó al Ministerio Público y agregar que «yo procuraré hablar con razón». Y «decir la verdad es mi deber, quiero agitar la verdad porque este proceso desde el principio es un fraude», añadióCorrupción. «Claro que condenamos la corrupción, siempre que se pruebe», «ha habido sospechas, rumores» y el fiscal ha dicho «voy a incoar procedimiento ver si encuentro algo, a tirar la caña. Estos es miserable en derecho».