La Junta pro Semana Santa debe decidir "cuando antes" si se construye un nuevo Museo de Semana Santa o se amplía el actual y encargar el proyecto para acudir a las instituciones "con algo", declara expresidente de ese órgano, Antonio Martín Alén, quien hoy preside la romería del Cristo de Valderrey y anuncia que su Cofradía debatirá pronto la incorporación de la mujer.

-Una nueva cita con la popular romería del Cristo de Valderrey, ¿aún se puede crecer?

-Sí, es una romería abierta, al igual que la Cofradía, somos 500 cofrades, hay mucha gente mayor y este año ha descendido el número porque ha habido fallecimientos, entre ellos el de un hermano joven, con 52 años, Juan Carlos Campos, y su familia ha participado de la comida y de la asamblea, viene a ocupar su puesto; el de Matías Bragado y el de Ángel Crespo.

-Los jóvenes participan en la romería, no en la Cofradía, ¿alguna estrategia para captarlos?

-En el traslado del Cristo a la ermita es cuando más gente joven participa y en la romería de hoy, cuando hay menos gente mayor porque es un camino un poco duro. Mi abuelo fue durante casi cuarenta años presidente de la Cofradía, mi padre casi los mismos y yo espero que alguien ocupe mi cargo antes, para ello estamos en un proceso de renovación de la Junta Directiva con gente más joven.

-¿Tienen pensado ampliar las actividades durante el del año para dinamizar la Cofradía?

-La Cofradía es que es muy cerrada para eso. También yo he estado muy ocupado con mis cargos y, a lo mejor, he bajado algo la guardia, pero sí que me gustaría dinamizarla de alguna manera que tendremos que comentar con la Directiva. La ermita tiene mucho atractivo porque tiene un comedor estupendo y hay sitio para poder convocar a gente, realizar actos conjuntos religiosos y sociales; crear una bolsa de caridad. La cuota anual son seis euros y con ella mantenemos la ermita.

-¿Los problemas de mantenimiento del templo están ya solucionados?

-El año pasado cambiamos parte de la cubierta, que tenía muchas goteras, este hemos hecho una actuación contra las termitas detectadas en la zona nueva y hemos conseguido que no pase a la iglesia. El tratamiento, muy agresivo, lo hemos extendido al porche, la ermita y el comedor por prevención. Tenemos que darle otro tratamiento de recuerdo a finales de junio porque lo alquilamos para eventos y gracias a eso la mantenemos.

-¿Echan de menos las subvenciones?

-Tuvimos una con el alcalde Andrés Luis Calvo (PSOE) de 62.000 pesetas que se mantuvo con Antonio Vázquez (PP) y con Rosa Valdeón (PP) ya no la tuvimos, no queremos presionar porque tampoco es una cantidad elevada. De hecho, a la comida de hoy acuden los representantes de las instituciones de forma amigable, como un romero más, y se lo agradezco.

-¿Hay alguna novedad acordada en asamblea?

-Hemos comunicado que ya somos titulares, por sentencia favorable, de la parcela de abajo de la pradera, donde están el pozo y el palomar. Hemos dado cuenta también de que hemos restaurado todos los bancos.

-¿Cuánto han invertido?

-La inversión global es pequeña, de poco más de 2.000 euros, porque el mantenimiento lo llevamos entre todos los hermanos, cada quince días limpiamos la pradera nosotros mismos. Con la cuota anual, que se mantiene en 6 euros al año, nos llega, no hemos pedido dinero a las instituciones, el Ayuntamiento de Zamora nos ayuda de forma indirecta, limpia la campa, nos habilita las líneas de autobús, para hoy, instala contenedores de basura, regula el tráfico y este es un desembolso que tenemos que agradecer.

-¿Para cuándo la incorporación de las mujeres?

-Tengo previsto proponer próximamente el debe de entrada de la mujer. Si es una romería debe estar abierta al pueblo y el pueblo somos todos, hombres y mujeres. Y estoy seguro de que la propuesta saldrá adelante.

-¿Para cuándo será la asamblea, tanto miedo les da que entren?

-No, ninguno y habrá mujeres a las que les apetezca sentarse donde estamos sentados los demás. No te puedo decir la fecha, hay que convocar la asamblea extraordinaria con ese único punto en el orden del día. A lo mejor es perder un poco la esencia de la Cofradía, que se creó por 36 hombres del campo, como recogen los estatutos de 1864, pero hay que hacerlo.

-Como expresidente de la Junta pro Semana Santa, ¿cree que Caja Rural les ha tomado la delantera al proponer el Museo de Semana Santa como uno de los ejes de su Zamora 10?, ¿ha dejado de ser la Junta punta de lanza en esa iniciativa?

-Al contrario, estamos de forma muy tímida, dando bandazos. Caja Rural ha hecho una inversión muy fuerte que nosotros no hicimos, encauzando una dirección, se han comprometido todas las instituciones y nosotros también, por supuesto, no podía ser de otra manera. Hay que agradecerle a Caja Rural no solo este proyecto, sino el respaldo constante a la Semana Sana, siempre está ahí para lo que se le pide.

-¿Está seguro de que es una oportunidad que no se dejará pasar como tantas?

-No, no. Nosotros vamos a tener una reunión del Consejo Rector la semana que viene para optar por ampliación o nuevo edificio, la última palabra la tenemos nosotros, pero la inversión y el proyecto que ha hecho Caja Rural es digno de agradecer por todos los zamoranos.

-¿Se ha perdido el tren de la Junta de Castilla y León o los 300.000 euros siguen ahí?

-El dinero está esperando a ser cobrado, a ver qué decidimos, si cogerlo y tirar para adelante, y para ello nos tenemos que comprometer en la ubicación y en elaborar el proyecto e ir a las instituciones, lo que no podemos es plantearlo de forma verbal, no nos pueden financiar sin un proyecto por delante.

-¿Hay una opción con más respaldo que otra?

-Debemos ser realistas y ver con que contamos, una ampliación sería muy acertada porque mantener un macromuseo y buscar la implicación de la Junta de Castilla y León en ello nos restaría libertad. Si no tenemos dinero para pagar la calefacción..., el mayor problema no que nos lo hagan, sino cómo mantenemos un "Guggenheim".