"Siempre hemos tenido mucho cuidado en que las novedades sean las mínimas y prácticamente inapreciables, para preservar la esencia que aquellos primeros hermanos tuvieron cuando fundaron la hermandad". El abad de la Hermandad de las Siete Palabras, José Tomás Santiago, destaca que los principales fundamentos de esta cofradía, que procesiona cada noche de Martes Santo, se han mantenido inalterables durante sus cincuenta años de vida.

La mesa redonda del Club LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA, bajo el título "Siete Palabras: 50 años de hermandad" se convirtió así en el primero de los actos de conmemoración de este aniversario y contó, además de con el abad, con la presencia del capellán José Alberto Sutil, del historiador zamorano Florián Ferrero y de una de las primeras mujeres que desfilaron con el caperuz de pana verde, Paula Ranilla.

Precisamente esta cofradía fue una de las pioneras en convertirse en mixtas. En 1982, una treintena de mujeres salió en la procesión. "Llevaban un pequeño cordón en una de las mangas, para distinguirse, apenas era visible y, de hecho, al año siguiente el obispo de Zamora, don Eduardo Poveda, decidió que se suprimiera", recuerda Santiago.

"Con mucha ilusión" reconoce el abad que se han organizado las diferentes actividades para celebrar este aniversario. "Queremos alargarlo durante todo el año", apuesta Santiago, "para que pueda participar el mayor número de personas posible". De esta manera, tras el foro del periódico, en la jornada de hoy se inaugura en el Seminario de San Atilano una exposición fotográfica -de 18.00 a 21.00 horas- que recorre la historia de la hermandad y que estará abierta hasta el próximo 14 de marzo.

Los Martes de Cuaresma serán otra importante cita en esta conmemoración. Estos cinco días se dedicarán a diferentes actos, todos ellos a las 20.45 horas en la iglesia de Santa María de la Horta. El 7 de marzo será el turno de un homenaje a todos los hermanos abades que han pasado por la hermandad durante su medio siglo de vida "en reconocimiento a su gran labor", subraya Santiago. El 14 de marzo la música llenará el templo de La Horta con la interpretación de "Las siete últimas palabras de Cristo en la Cruz", interpretado por el Cuarteto de Cuerda Berdión.

El 28 de marzo será uno de los días más especiales de este ciclo de actividades, puesto que se presentará y bendecirá la nueva cruz guía, que este año se incorporará al recorrido, y que está cargada de símbolos que hacen referencia a este 50 aniversario. A este respecto, el abad adelanta que, debido a esta celebración "este Martes Santo se saldrá de la Catedral, aunque la Horta sigue siendo nuestra sede", subraya el abad.

Por último, el 4 de abril, tras el rezo de las Siete Palabras, se dará la bienvenida a los nuevos hermanos. De esta manera, a los cerca de 1.700 miembros se les unirá una veintena de zamoranos "que serán savia nueva para la cofradía", asegura.

Pero si de algo se siente especialmente orgulloso el actual abad es de la obra social que desarrolla la hermandad desde hace más de ocho años y que puso en marcha su predecesor, Javier Mendiri. Festivales benéficos o recogidas de alimentos engrosan las actividades en este sentido, cuyos beneficiarios son en su mayorías familias del barrio de La Horta. "Nosotros somos quizá más sencillos y austeros que otras cofradías, pero esta obra social es lo que termina nuestro nombre de hermandad penitencial", finaliza José Tomás Santiago, que este año deja su cargo de abad "para volver a la fila".