Una expedición a la Antártida como colofón a un año de formación en técnicas de liderazgo, networking, elaboración de proyectos y gestión de equipos. La científica zamorana Ana Payo vislumbra un horizonte muy prometedor después de llamar a las puertas del "Homeward Bound Project" y conseguir que se abrieran. Este programa, nacido por iniciativa de dos australianas, persigue el objetivo de dar visibilidad a las mujeres científicas para conseguir alcanzar cotas altas de poder en un sector en el que la desigualdad es algo latente. Equiparación en cuestión de género, políticas medioambientales, cambio climático y liderazgo social unidos bajo un mismo paraguas. Un proyecto que, en la edición de 2018, incluirá la seña bermeja entre sus estandartes.

Oceanógrafa y ambientóloga, la zamorana Ana Payo desarrolla su carrera científica en el Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados (Imedea) de Esporles, en las Islas Baleares. "Los últimos cuatro años he trabajado en este instituto bajo la supervisión de Daniel Oro. Ahora mismo, estoy a punto de defender mi tesis doctoral en ecología de poblaciones de aves marinas, centrada en gaviotas", explica Payo. Una labor que compatibiliza con su faceta de divulgadora científica en Big Van, una de las más importantes compañías españolas en este ámbito que utiliza el monólogo como herramienta para hacer llegar la ciencia a los ciudadanos.

A todo lo anterior habrá de sumar, a partir de ahora, su condición de participante en el "Homeward Bound Project" en su edición de 2018. "El programa destaca por su carácter pionero e innovador, ya que integra los ámbitos de igualdad de género, cambio climático y liderazgo científico, político y social", explica Ana Payo. Un proyecto cuyo horizonte se expande hasta los próximos diez años. "Lo que pretende el "Homeward Bound Project" es contribuir al empoderamiento y visibilización de las mujeres científicas, así como facilitar su acceso a las responsabilidades propias del liderazgo", comenta. "Además, fomentará la creación de una red de científicas que lideren e informen sobre las políticas medioambientales, demostrando que dar acceso a las mujeres a posiciones de liderazgo e incluirlas en el proceso de toma de decisiones puede mejorar la manera en la que respondemos a las amenazas del cambio climático", añade.

A lo largo de los próximos meses, hasta febrero de 2018, Ana Payo recibirá formación personal y especializada en técnicas de liderazgo, networking, elaboración de proyectos, búsqueda de financiación, relaciones internacionales y gestión de equipos. "Pero el broche de oro del programa es una expedición de tres semanas a la Antártida", apunta. La científica zamorana compartirá equipo con 70 participantes de diferentes países, entre las que únicamente se encuentran cuatro españolas. "Uxue, trabajadora de Acciona; Nerea, estudiante de máster en el Jardín Botánico; Alejandra, investigadora de la Universidad de Córdoba; y yo, investigadora en Imedea-CSIC", explica.

El objetivo, ahora, es conseguir financiación. "Como parte del programa, cada participante necesita recaudar 20.000 euros para cubrir la mitad de los costes de la formación, la expedición a la Antártida y la grabación de un documental sobre la expedición. La otra mitad la cubren diferentes patrocinadores", explica. Por el momento, Ana Payo cuenta ya con dos empresarios mallorquines que contribuirán al proyecto. Como zamorana, confía en que su tierra pueda también estar presente en el continente helado.