La Evaluación de Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU), la nueva Selectividad que se implanta este curso, ha provocado el rechazo por parte de los profesores de segundo idioma, ya que uno de los cambios que contempla es que los alumnos solo se puedan examinar de la primera lengua extranjera que estén cursando. "Hasta ahora, y desde hacía ya casi una década, los estudiantes podían presentarse a la prueba de lengua extranjera con el idioma que eligieran, no era imprescindible que se tratara de la que estuvieran estudiando en clase", apuntan los profesores.

Francés, alemán, italiano o portugués se unían así hasta ahora al inglés como opciones para examinarse. A partir de ahora, este último idioma en la mayoría de los casos -en Zamora es la única opción de primera lengua- será el único del que se puedan examinar. "Nos hemos enterado casi de repente y muchos alumnos, atendiendo a las pruebas de años pasados, ya se estaban preparando para otros idiomas, así que están indignados, porque tenían esa oportunidad que ahora parece que va a desaparecer, y han perdido casi seis meses de preparación de cara a la prueba. Tenían esa libertad de elección y ahora se les ha cerrada esa puerta", denuncian.

En este sentido, además, recuerdan que incluso se han perdido horas lectivas. "Una en cuarto de la ESO y otra en 1º de Bachillerato", contabilizan.

Por otra parte, los docentes consideran que este cambio "es una gran paradoja", puesto que mientras que con la Lomce prevalece el estudio de las lenguas "y se pregona el multilingüismo y los bachilleratos de excelencia de idiomas, como el que se ha implantado este año en el instituto María de Molina, a los nuevos currículos no se les otorga esta relevancia que se supone que debe tener", argumentan. Una relevancia palpable, ya que "al salir extranjero, comprendes lo imprescindibles que son los idiomas".