Alrededor de 720 familias de la capital sin recursos y en situación de vulnerabilidad tendrán acceso a una nueva ayuda para costear el importe íntegro de la factura del consumo de agua. La iniciativa social parte de un convenio suscrito ayer entre el Ayuntamiento de Zamora y Aquona que implica una aportación global de 56.000 euros a razón de 28.000 euros por año por parte de la empresa gestora del agua.

El deterioro de la economía doméstica lleva a más de 2.000 hogares zamoranos a no poder afrontar el pago del recibo del agua. De todos ellos, los que se encuentren en situación de mayor precariedad serán los beneficiarios del fondo social, que será objeto de una convocatoria para que los perceptores soliciten la ayuda económica. Para ello, "será necesario elaborar las bases de la convocatoria para su aprobación, un trámite obligatorio conforme a la ley, si bien este mismo año la ayuda se pondrá en marcha y se agotará todo el dinero para ayudar a las familias que lo necesiten", garantizó el alcalde, Francisco Guarido, tras suscribir el convenio en el Ayuntamiento de Zamora.

El acuerdo tendrá una vigencia de dos años y se adaptará a las bases reguladoras que establezcan los requisitos, las condiciones y el procedimiento para obtener la condición de beneficiario de estas ayudas. Los cálculos del equipo de Gobierno pasan por tener los requisitos listas "en dos o tres meses" y, en cualquier caso, "a la mayor brevedad posible".

El acuerdo de colaboración para la creación del fondo social fue rubricado ayer por el propio alcalde de Zamora, Francisco Guarido, y el director general de Aquona en Castilla y León, Jesús García, acompañados por la concejala de Servicios Sociales, María José González y el edil de Recaudación, José Carlos Calzada, así como el gerente de Aquona en Zamora, Nicolás Esmorís.

El convenio se enmarca dentro del acuerdo marco rubricado con la Federación Regional de Municipios y Provincias de Castilla y León, a través del que se van haciendo posibles estos convenios con diferentes ayuntamientos de la región. Con este acuerdo, Aquona pretende, además de proporcionar un servicio de calidad, "estar presente en la sociedad zamorana y colaborar con las familias en situación de vulnerabilidad social a través del establecimiento de este fondo social", ahondó Jesús García.

El pago del recibo afectará a la parte dedica al consumo de agua, no a la del saneamiento, si bien la institución local estudia otros cauces para poder costear también este aspecto, tal y como ocurre con los bonos para la energía.