El procedimiento de regularización catastral que inició el Ministerio de Hacienda en 2013, ha permitido regularizar 22.591 inmuebles urbanos en Zamora, 164.141 en Castilla y León, según los datos de que dispone el departamento que dirige Cristóbal Montoro recogidos por Ical. El plan diseñado para que afloren bienes ocultos o irregulares concluyó en 131 municipios de Zamora y 1.312 de la Comunidad, hasta mediados del año pasado.
El trabajo efectuado a través de un rastreo desde el aire por satélite y drones, proseguirá a lo largo de este ejercicio, para destapar bienes inmuebles que no constaban a los ojos de Hacienda y que por lo tanto no estaban tributando. En concreto, una resolución del departamento que dirige Cristóbal Montoro, publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE) del 20 de diciembre de 2016, refleja que el procedimiento se aplicará hasta el 30 de noviembre de 2017 en otros 323 municipios de la Comunidad, 49 de ellos en Zamora.
Estas labores de vigilancia contra el fraude fiscal permitieron destapar nuevas construcciones; ampliaciones y rehabilitaciones; reformas y cambios de uso; y piscinas. León fue la provincia con diferencia en la que mayor número de inmuebles afloró, con 37.774 en 119 poblaciones; seguida de lejos por Salamanca y Zamora, donde se inspeccionaron con las nuevas tecnologías 182 y 131 municipios y se regularizaron 22.578 y 22.591 construcciones. Ávila también superó los 20.000 inmuebles aflorados (21.592), con el trabajo de campo efectuado en 138 localidades.
La Dirección General del Catastro detectó 16.743 inmuebles ocultos o irregulares en Burgos, en 260 núcleos de población; mientras que esa cifra se redujo hasta los 13.651 en Valladolid, donde se inspeccionaron 134. Algo más de 10.000 bienes se destaparon en Segovia (10.027) y Soria (10.465), donde las labores de Hacienda se cerraron en 123 y 95 municipios, en cada caso. Por último, en Palencia sólo se regularizaron 8.720 bienes durante el periodo descrito, que salieron a la luz en 130 poblaciones.
El análisis de los inmuebles ocultos o irregulares refleja que el mayor peso de lo aflorado, en cifras redondeadas sin decimales, correspondió a reformas o cambios de uso. En concreto, estos inmuebles modificados sin declarar representaron el 57% de los destapados en Soria; el 46% en Valladolid; el 41% en Zamora; el 40% en Burgos y León; el 35% en Palencia; el 33% en Ávila y Segovia; y el 31% en Salamanca.
En cuanto a las ampliaciones y rehabilitaciones afloradas, tuvieron más peso en la provincia segoviana, donde supusieron el 35% del total de inmuebles regularizados, frente al 31% en la leonesa; el 30% en la vallisoletana; el 29% en la palentina y la abulense; el 28% en la salmantina; el 26% en la zamorana; el 25% en la burgalesa; y el 18% en la soriana.
Nuevas construcciones
Las nuevas construcciones, supusieron el 38% en Salamanca; el 35% en Ávila; el 34% en Palencia; el 31% en Burgos; el 32% en Zamora; el 30% en Segovia; el 27% en León; el 24% en Soria; y el 22% en Valladolid. Las piscinas, representaron entorno al dos por ciento en todas las provincias menos en Soria, donde supusieron menos del uno por ciento de peso relativo en el redondeo; y en Valladolid y Zamora, donde sumaron alrededor de un uno por ciento, en los dos casos.
Los datos facilitados a Ical, por el Ministerio de Hacienda, indican también la subida media del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) en los municipios donde se aplicó el plan de regularización. Las mayores subidas medias de este tributo se registraron en Zamora, un 8,83%, seguida de Soria, con un 8,8% de incremento.
El alza media del IBI se situó en los municipios investigados de Segovia, en el 4,16%; mientras que en los leoneses sumó un 3,8%; en los vallisoletanos alcanzó el 3,44% , y en los abulenses, el 3,24%. La subida media del IBI en las localidades donde se aplicó el plan de Burgos, llegó al 2,18%, en Palencia, el 2,06% por ciento; y en Salamanca, el 1,41%.
