La Audiencia Provincial condenará a dos años de cárcel a cuatro imputados (seis meses a cada uno) en 19 robos de galgos perpetrados en 2007 y al pago solidariamente de 30.000 euros para indemnizar a los propietarios de los canes, unas penas muy inferiores a los 23 años solicitados inicialmente, ya que retira la acusación de pertenencia a organización criminal al fallecer el supuesto cabecilla en estos casi diez años de instrucción.

La Audiencia aplicará, asimismo, el atenuante de reconocimiento del delito por parte de los cuatro procesados, que se conformaron al comenzar el juicio, tras una larga negociación que retrasó el inicio de la vista oral más de una hora. Uno de los acusados tendrá que cumplir la condena con un tratamiento ambulatorio de la enfermedad mental, que le ha valido la atenuante de enajenación mental.