El incremento hasta los 400.000 euros de la partida para los Centros Municipales Integrados contribuye al incremento de la partida de Servicios Sociales hasta los 16.080.425 euros, según recogen los presupuestos de la Diputación. Las cuentas, tal y como plantea la propia presidenta de la institución, Mayte Martín Pozo, "están pensados para intentar, porque esto es muy difícil de conseguir, la igualdad de todos los ciudadanos del medio rural". Las partidas de política social suponen el 31% del total. En este sentido, el presupuesto de este año recién estrenado aspira a ser "sensato, social en todo y pensado para las personas", insistió Martín Pozo durante la presentación de las cuentas. El cuadro económico se encuentra aún en periodo de exposición pública para poder recibir alegaciones. Las cuentas, aprobadas inicialmente en el pleno del pasado 16 de diciembre, tienen una previsión de gasto de 61,9 millones de euros de los que el 31% va destinado a política social; el 27%, a recursos humanos; el 17%, a transferencias corrientes; el 10%, a transferencias de capital; y el 8%, a pasivos financieros. La sesión plenaria aprobó el presupuesto general de la institución provincial con los apoyos del grupo popular, Ciudadanos y el diputado no adscrito, Ángel Prada. Por el contrario, contó con los votos en contra de los diputados de los grupos del PSOE e Izquierda Unida, que decidieron dar la espalda a las cuentas del Partido Popular por no aceptar ninguna de las enmiendas presentadas por ambos. La abstención era la otra alternativa.
