La Guardia Civil ha interceptado a un conductor que circulaba en dirección contraria por la autovía A-11 y dio positivo en el control de alcoholemia que le realizaron los agentes tras su detención.

Los hechos ocurrieron en la madrugada del 27 de diciembre cuando varios usuarios de la autovía llaman por teléfono a Tráfico para advertir que hay un individuo circulando en dirección contraria, en las inmediaciones de la capital, en un día de densa niebla.

Una patrulla se acerca al lugar para tomar las oportunas medidas de seguridad y alertar al resto de conductores. El infractor se percata de la presencia de los agentes y da un giro de 180 grados, para huir, esta vez en la dirección correcta.

La patrulla de la Guardia Civil logra darle alcance, lo para en el arcén y le hace la prueba de alcoholemia, con resultado positivo. El conductor, vecino de Valladolid, es detenido como presunto autor de dos delitos, uno de conducción de vehículo a motor bajo la influencia de bebidas alcohólicas y otro de conducción temeraria. El Código Penal prevé para este tipo de acciones pena de prisión de seis meses a dos años, además de la privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a un año y hasta seis años.

Las diligencias instruidas han sido entregadas en el Juzgado de

Guardia de Zamora.