Huyó de Cuba cuando Fidel Castro llevaba seis años en el poder. "La decisión fue muy difícil, pero tuvimos una clara visión de lo que nos podía esperar si nos quedábamos". El matrimonio formado por el cubano Benigno Bermúdez, con antepasados zamoranos, y su mujer Orquídea, natural de la isla, asegura sentirse "muy feliz" con la noticia de la desaparición de Fidel Castro. "Llevamos 52 años fuera de Cuba y gracia a dios por fin ha ocurrido lo que esperábamos desde hace tanto tiempo", afirma la cubana, quien toma la palabra para explicar todo lo que vivieron desde que tomaron la iniciativa de emigrar a Estados Unidos, primero ella con su madre y cuatro años después el que por entonces era su novio, quien logró salir "solo gracias a engaños", rememora.

Nueva vida en Nueva Jersey

Afincados en Nueva Jersey, aseguran que el problema del comunismo "es que si no eres de los suyos, es que eres su enemigo, aunque te consideres una persona neutral", resumen. "Yo estaba en la universidad cuando tuve que irme de mi país, porque no estaba de parte del régimen, porque tenía otros ideales", indica Orquídea, que por aquel entonces contaba con 27 años. Afortunadamente, fueron de los que más suerte tuvieron puesto que, con mucho esfuerzo, lograron reagrupar a toda la familia en Estados Unidos.

Por último, preguntados por cómo ven ahora el futuro de su país de origen, reconocen desde la distancia de cientos de kilómetros que "las cosas cuando estás fuera se ven de manera diferente, porque hay opiniones muy diversas", pero consideran que Fidel Castro "fue el verdadero cerebro de toda la revolución" y consideran que sin "esa guía", con su hermano Raúl Castro, en el poder desde principios de 2008, "las cosas no serán lo mismo".