La Plaza Mayor se tiñó de morado, el color elegido para reivindicar la dignidad de la mujer frente al terrorismo machista que ha provocado la protección judicial de 151 zamoranas, cuyos maltratadores tienen órdenes de alejamiento. La ciudad conmemoró ayer así el Día Internacional contra la Violencia de Género. El 25 de noviembre volvió a desempolvar las conciencias de los zamoranos, que protagonizaron la más numerosa de las concentraciones, con varios centenares de ciudadanos, en la Plaza Mayor, en el acto institucional unitario organizado a propuesta del Ayuntamiento de Zamora, que reunió a las 18.30 horas a cargos públicos de todas las instituciones, si bien la presidenta de la Diputación Provincial, Mayte Martín Pozo, decidió por la mañana convocar a los funcionarios de esta institución para guardar silencio por las víctimas de violencia de género y denunciar esta lacra social. Lo mismo hizo la Asociación de Mujeres en Igualdad, cuyos participantes portaron una vela blanca, en la plaza de la Constitución; e integrantes del sindicato de izquierdas CGT, en la plaza de Zorrilla, donde colgaron carteles y repartieron información entre los ciudadanos.

Al pie de la Casa de las Panaderas, las autoridades cedieron la primera línea a mujeres adolescentes que portaban carteles con leyendas para concienciar sobre el maltrato, con eslóganes como "disculpen las molestias, pero nos están asesinando", "no son enfermos, son hijos sanos del patriarcado", en referencia a los maltratadores, "si tocan a una, nos tocan a todas" o "ni golpes que duelan, ni palabras que hieran" y "juguemos al ahorcado, está muriendo el patriarcado".

El acto se completó con el relato de tres mujeres maltratadas, interpretado por actrices sobre un pequeño escenario para colaborar a la visibilización de unas conductas machistas que anulan a la mujer por el mero hecho de serlo y que se llevan por delante la vida de muchas de ellas, en este año ya son 41, seis de la comunidad autónoma de Castilla y León. La concejala de Igualdad, Laura Rivera, dio lectura a un texto.

En la capital zamorana, el Juzgado de Violencia de Género ha recibido hasta la mitad del año 170 denuncias de mujeres que han sufrido el maltrato de sus parejas. Además, 128 están bajo vigilancia policial para impedir que los agresores puedan cumplir con sus amenazas de muerte.