"Es urgente la finalización de los cien kilómetros que restan a la autovía entre Braganza y Zamora". La exigencia viene de la Red Ibérica de Entidades Transfronterizas de Cooperación (RIET) a través de su secretario general, Xoan Vázquez, quien adelanta que la puesta en marcha de esta infraestructura "revertirá en el desarrollo económico de ambas zonas".

El objetivo de esta entidad es sumar fuerzas a uno y otro lado de la frontera "porque así somos más fuertes y se lograrán no solo mejores servicios, sino también será esencial para el crecimiento económico del territorio". Una meta interesante si se tiene en cuenta "que el 37% de la población europea vive en territorio de frontera, lo que nos otorga cierto peso", valoró Vázquez. En el caso de España y Portugal, ambos países comparten más de 1.200 kilómetros de frontera.

Otras de las reivindicaciones de la red pasan por reforzar el modelo sanitario a ambos lados de la frontera "para dar servicios con menos recursos, especialmente en las zonas más sensibles", homologar títulos educativos entre España y Portugal o crear una autoridad central única de coordinación de emergencias para mejorar los trabajos contra el fuego, según se enumera desde esta entidad.

La RIET, conformada por un grupo de once asociaciones empresariales, trece entidades transfronterizas y siete universidades, celebró ayer en Zamora una reunión de su comité director en el Centro de Interpretación de las Ciudades Medievales, previa a la asamblea general que se desarrollará en Miranda do Douro. La entidad, nacida en junio de 2009, está constituida por organizaciones próximas a la frontera de España y Portugal y tiene como objetivo el promover la cooperación transfronteriza, el desarrollo socioeconómico en estos territorios y establecerse como una sola comunidad de interés ante los gobiernos de España, Portugal y la Unión Europea.