Menos gente que otros años se apreciaba en el cementerio de San Atilano en el día de Todos los Santos, la jornada propicia para visitar a los seres queridos que reposan para siempre en el campo santo. No es que la costumbre vaya a menos, sino que este año más bien, por la coincidencia de las fechas del "puente" festivo la visita al cementerio por parte de las familias ha sido más escalonada y se ha venido produciendo durante todo el fin de semana.

La reubicación de los puestos de flores dejaba la entrada del cementerio para aparcamiento, pero el escaso número de plazas hacía que prácticamente durante toda la jornada estuviera cerrado el acceso. En cambio los puestos quedaban bastante alejados, en el acceso al Ruta de la Plata, lugar que no es de paso obligado salvo para aquellos que se llegaran a aparcar el coche a los aledaños del campo de fútbol, entrando por la carretera de Bermillo. En general el personal que acudió en automóvil particular prefirió opciones más cercanas y, bien el Pinilla o bien en los arcenes de la misma carretera nacional 630 dejaron sus vehículos como en otras ocasiones.

Por lo demás, dentro del cementerio, las estampas habituales. La capilla funcionaba con sus cultos, el ordenador de la oficina permitía a aquellos más despistados buscar la fosa de sus seres queridos, al indicar, simplemente metiendo el nombre, el cuartel y la sepultura donde está enterrado. Es también una buena ayuda para quienes quieran visitar las tumbas de los personajes ilustres que reposan en San Atilano, por ejemplo la simbólica lápida del poeta Claudio Rodríguez o, un poco más adelante, la sencilla tumba del filósofo Agustín García Calvo, ayer con un mensaje de amor escrito a mano en una hoja de papel.

Las familias gitanas son, sin duda, las que formaban los grupos más numerosos en torno a las tumbas de sus allegados, debido a la importancia que tiene en su cultura el culto a los muertos. La jornada resultaba agradable para la visita al cementerio, que cambia su fisonomía de la zona antigua hasta la más moderna ampliación, con césped y sin árboles, o la zona de los nichos, donde quedan aún muchas sepulturas disponibles para las necesidades de la ciudad. La ausencia de lluvias hacía que el camposanto luciera limpio y ordenado para la visita a los panteones. El cambio de hora, eso sí, acorta la tarde para los más rezagados, aunque suelen ser las horas centrales del día las de mayor afluencia.

Hoy, fieles Difuntos

Para hoy, la festividad de los Fieles Difuntos, está previsto, como es habitual, el acto militar de homenaje a los caídos en el cementerio de San Atilano de Zamora. Acudirá el Comandante Militar de Salamanca y Zamora y jefe del mando de Ingenieros Ricardo Guillén y el subdelegado del Gobierno Jerónimo García Bermejo así como otras autoridades civiles y militares invitadas por el citado alto mando.

La Cofradía de ánimas de San Atilano organiza también un homenaje póstumo a los seres queridos que descansan para siempre en el cementerio de San Atilano. A las 12.00 horas se celebrará en la capilla del cementerio en sufragio de los familiares difuntos. Para las 20.15 horas está convocada la procesión por las calles del cementerio con el Santo Cristo del Perdón, rezando el santo rosario, dirigido por el capellán de la hermandad, Emilio Santiago Lorenzo. y aplicándolo por todos los que descansan en la paz del señor. A la procesión asistirá la Hermandad de Jesús de Luz y Vida, acompañada por el coro. La Cofradía de Ánimas de San Atilano ruega a los hermanos y hermanas que acudan con las velas encendidas, que podrán recoger a la entrada de la capilla del cementerio.