Con sus pequeñas manos moldean arcilla para intentar crear maternidades como las que he hiciera el escultor Baltasar Lobo, un artista que conocieron ayer un poco más una docena de niños que asistieron al primero de los talleres programados desde el Museo de Zamora por la clausura de la exposición temporal "Hazme un sitio en tu montura. Baltasar Lobo, León Felipe y la España peregrina".
En la actividad, denominada "Conoce a Baltasar Lobo" los niños se familiarizaron con la construcción de una estructura dado que el artista terracampino "las utilizaba en sus maternidades, las hace a través del cuerpo de la mujer que sujeta al bebé", explica la responsable de Didáctica del Museo de Zamora, Lourdes Espinazo que indicó a los menos cómo crearlas con plastina y pequeños palos.
A continuación los asistentes descubrieron piezas de Lobo presentes en la exposición temporal y en el Museo de Zamora. En este recorrido les llamó la atención que el escultor utilizara siempre formas redondas e incluso más de uno reconoció piezas que se exhiben en la ciudad, como la obra ubicada en la plaza Zorrilla o en el parque del Castillo.
La parte final del taller, que tuvo hora y media de duración, correspondió a la creación en arcilla de una maternidad, temática muy presente en la obra de Lobo. "No es nada sencillo de hacer", manifestaba Gala Muriel de 8 años mientras intentaba hacer la cabecita del niño. Su compañera Lucía Merino, de 10, explicaba que en la actividad "he aprendido más cosas sobre este escultor" a lo que la más pequeña del grupo, Lidia Robles, de 7 años, agregó: "La escultura es divertida".
El taller vuelve a repetirse esta mañana en las dependencias del Museo de Zamora como colofón a la muestra que permite conocer el legado del León Felipe y de Baltasar Lobo. "Hazme un sitio en tu montura. Baltasar Lobo, León Felipe y la España peregrina", que podrá disfrutarse hasta esta tarde, reúne más de 60 obras en bronce, escayola, mármol y muchos bocetos del escultor nacido en Cerecinos de Campos, que habitualmente se encuentran en los almacenes del Museo de Zamora; y una treintena de textos de León Felipe entre los que llaman la atención los escritos de su puño y letra que custodia el Archivo Histórico Provincial.
