Los docentes zamoranos aseguran que la "indefinición" derivada de la "deficiente" aplicación de la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa, la Lomce, causará problemas a lo largo del próximo curso. Los planes del Ejecutivo indicaban que la controvertida norma tendría que aplicarse, ya de manera definitiva, durante este curso en todos los centros escolares de la comunidad -en cursos anteriores ya se empezó a aplicar en algunos niveles educativos-. Los alumnos de cuarto de Educación Secundaria Obligatoria y de segundo de Bachillerato son los que, en teoría, vivirán los cambios durante los próximos meses.

Sin embargo, la indefinición provocada por la falta de Gobierno y el hecho de que la ley educativa que impulsó Wert sea una de las normas más rechazadas de las elaboradas por el Ejecutivo de Mariano Rajoy hacen que el panorama sea convulso. Los principales cambios en cuarto de ESO y segundo de Bachillerato tienen que ver con el final del curso. Los alumnos que en junio acaben uno de estos dos cursos tendrán que someterse a reválidas, unas pruebas de las que de momento solo se sabe que no tendrán efectos en el expediente académico. Sin embargo, en el caso de los estudiantes de segundo de Bachillerato, la prueba sí que será válida para el acceso a los estudios universitarios.

La cuestión es que a día de hoy, con el curso ya empezado desde hace semanas, las pruebas -tanto la de ESO como la de Bachillerato- todavía no cuentan con un marco normativo que indique cómo se van a desarrollar. Según han indicado fuentes de la comunidad educativa zamorana a este diario, "lo que esperamos" es que dicho marco normativo se dicte "este mes como muy tarde". Los docentes y "el propio sistema educativo", aseguran las mismas fuentes, "tienen que adaptarse a las pruebas, por no mencionar a los alumnos, que todavía no saben qué pruebas tendrán a final de curso".