Carlos Martínez, alcalde de Soria, quizá dio con la clave cuando el pasado lunes evaluó lo que supone para su ciudad recibir cinco millones de euros de fondos para el desarrollo. "Hemos trabajado desde la pasada legislatura para ejecutar las iniciativas de forma coordinada y global, en este caso, con distintas medidas para el Casco Viejo pero todas interrelacionadas, sin actuaciones aisladas", comentó al Heraldo de Soria. La ciudad de Zamora puede extraer dos conclusiones de la valoración del regidor soriano. En primer lugar, que aquí no se ha trabajado desde la pasada legislatura para ejecutar nada; simplemente se encargó un documento en marzo de 2015, apenas tres meses antes del fin del plazo de la convocatoria. Y en segundo, que no existía interrelación alguna entre los proyectos, sino que era una batería de iniciativas inconexas entre sí.

La clave del éxito, por lo tanto, parece estar en esa cohesión entre las actuaciones. Palencia, capital de la región que ha recibido más fondos (10 millones), presentó una estrategia basada en la sostenibilidad de la ciudad. Sus proyectos, nada megalómanos, pasan por fomentar el uso de la bicicleta a través de más carriles y un nuevo sistema de préstamo; favorecer la movilidad eléctrica con la instalación de postes de recarga; crear nuevas áreas de itinerarios peatonales; renovar las flotas de autobuses y vehículos municipales por motores híbridos; o implementar sistemas de minimización de la demanda energética en los edificios públicos. Una estrategia "en verde" que les ha valido la aprobación del Ministerio de Hacienda para recibir fondos.

La vecina Salamanca apostó por el río como epicentro de sus diferentes proyectos. El programa "Tormes+" (9,45 millones) toma el cauce como excusa para construir a su alrededor medio millón de huertos urbanos, un corredor verde, una pasarela sobre el río, un Centro de Interpretación del Tormes, un circuito biosaludable, un recinto deportivo, un parque de aerogeneradores, una base de préstamo de bicicletas y un centro de coordinación para controlar todo el proceso.

Soria, tercera y última capital de Castilla y León beneficiada por los fondos europeos, ha centrado su desarrollo en el Casco Viejo de la ciudad numantina. Los cinco millones que va a recibir de Europa van a ir destinados a rehabilitar patrimonio como la Muralla o las Ruinas de San Nicolás. También se ejecutarán importantes proyectos como la construcción de un centro cívico -tan ansiado en Zamora- o un centro multiusos. Igualmente, se trabajará en promocionar la movilidad urbana sostenible, en implementar un plan de vivienda joven o en tomar medidas para el emprendimiento.

Lo que tienen en común las tres afortunadas capitales es que su estrategia estaba cohesionada, tomaban un punto de referencia y a partir de ahí proyectaban una serie de intervenciones y medidas para beneficiar a la ciudad. Mucha nota debe tomar Zamora para la siguiente convocatoria.