La financiación del proyecto para la implantación de una planta de biorrefinería multifuncional en Barcial del Barco es el principal escollo al que se enfrentan sus promotores. Alrededor de 140 millones de inversión y otros 20 más de capital inicial implican una búsqueda activa de fondos en la que "la Junta de Castilla y León ya se ha puesto manos a la obra", asegura el presidente de la Confederación de Organizaciones Empresariales de Castilla y León, Santiago Aparicio. En este sentido, el directivo explica que "ya están en negociaciones para buscar una inyección económica a través de fondos de inversión para que entren en el capital y, una vez que tengan ese capital social mínimo, la financiación vendrá por sí sola y el proyecto será una realidad", incide. La propia Administración regional ha catalogado el proyecto como "estratégico" para que el etanol pueda optar a incentivos regionales.

La infraestructura en cuestión consiste en la construcción de un complejo industrial para la producción de 42.000 metros cúbicos de bioetanol al año y la producción de 17 megavatios por hora de electricidad mediante un sistema de ciclo combinado, así como la producción de 36.000 toneladas anuales de piensos. Para hacer posible esta fábrica se utilizaría como materia prima fundamental la remolacha. Se molturarían entre 1.000 y 1.400 toneladas diarias, 350 toneladas de cereal de forma complementaria y gas natural a través de ciclo combinado. Entre las ventajas de esta biorrefinería está la posibilidad de cambiar de materia primera en entrada de manera rápida y eficiente, lo que permitiría sacar ventajas ante situaciones cambiantes, como las variaciones de precios o las adversidades climatológicas.