"En la grabación se comprueba como el paciente llega a Urgencias en camilla, sin sujeción, cómo lo dejan sólo, se levanta y se cae y como posteriormente y ya en coma, tratan de levantarlo agarrándolo por los brazos. Se oye con claridad en el vídeo como los chicos que casualmente lo grabaron refieren: "Vaya hostia que se ha dado en la cabeza"". Es el relato de la prueba fundamental presentada por un paciente que reclamó a Sacyl una indemnización de 107.111 euros por la caída sufrida desde una camilla como consecuencia de la cual le ha quedado un deterioro neuropsicológico. Es la mayor indemnización solicitada por un paciente de Zamora a Sacyl durante el pasado año, aunque el Consejo Consultivo desestimó la reclamación, al considerar que no está claro que la caída de la camilla se debiera a una negligencia del personal de la ambulancia y tampoco que éste golpe fuera el causante de las secuelas del paciente.

Aunque el asunto se ventiló el pasado año los hechos se remontan a 2011. Esta persona regresaba a su casa a las doce y media de la noche, bebido, y sufrió una caída en la calle y se produjo una herida en el tabique nasal, según relata él mismo. Una ambulancia de soporte vital básico recoge al paciente y lo lleva a Urgencias y es ahí donde "de forma totalmente causal es grabada la llegada del paciente por desconocidos que posteriormente colgaron la grabación en Youtube (...)donde se deja constancia de cómo fue manipulado el enfermo. (...) Como consecuencia de la caída, y tras los intentos de levantarlo de forma, cuando menos anómala, se procede a ingresarlo en camilla y ya en coma".

Para el paciente, ha sido el funcionamiento anormal del servicio público lo que le ha ocasionado "un daño evidente (...), con un rendimiento por debajo de la normalidad en la mayoría de las funciones cognitivas analizadas (memoria, gnosias, praxias, atención, orientación y especialmente en la función ejecutiva, pensamiento abstracto y capacidades espaciales). Especialmente significativo es el enlentecimiento en la velocidad de procesamiento mental".

El Consultivo aprecia sin embargo que el personal de la ambulancia y la celadora del hospital sí estaban pendientes del enfermo, que aprovechando un momento en que estaban ocupados con los papeles, se tiró de la camilla para intentar marcharse, lo que motivó la caída. Además el Consultivo indica que no puede probarse si las lesiones son consecuencia de la primera caída, la de la calle, o de la sufrida desde la camilla, ya en Urgencias.