Tras finalizar las labores de rescate por parte de los bomberos y cubrir la trinchera abierta por la máquina excavadora, varios enseres del pastor fallecido el pasado lunes en la finca de Valderrey permanecían aún ayer en la zona. Entre los objetos, se encontraban tanto pertenencias personales del pastor como herramientas utilizadas para horadar el terreno, todas ellas, muy rudimentarias y en mal estado. Unas botas, una camiseta, un cubo así como la pala y unas básicas escaleras similares a las que se utilizaban en las antiguas piscinas son algunos de los efectos que recuerdan el suceso.

El operativo montado por el pastor marroquí con la ayuda de otro trabajador de nacionalidad portuguesa ha sorprendido incluso a los agentes de Bomberos y Policía Nacional. Las reducidas y angostas dimensiones del hoyo, de más de diez metros de longitud y tramos con hasta 60 centímetros de diámetro, han llamado la atención tanto por el rudimentario sistema utilizado para la excavación como por el móvil que les llevó a cavar la zanja. La búsqueda del supuesto tesoro, una operación que acabó en tragedia, también ha recalado con sorpresa en la localidad de Tierra del Pan, donde los vecinos no logran comprender "qué le llevaría a tener eso en la cabeza".