Comienza la Semana Mundial de la Lactancia Materna en 170 países alrededor del globo, que se celebra desde 1992 cuando la Organización Mundial de la Salud (OMS) y Unicef se unieron para instaurarla. La iniciativa tiene como finalidad promover el amamantamiento y dar a conocer los beneficios de esta práctica. La OMS recuerda que la leche de la madre es el único alimento que el bebé necesita en sus seis primeros meses de vida.

La semana llega durante uno de los momentos donde dar el pecho se encuentra en el centro del debate. Las asociaciones pro lactancia defienden la importancia de mantener una lactancia continuada para el correcto crecimiento de los niños. Para ello, se basan en organizaciones e informes como los de la OMS y Unicef. Estas instituciones recomiendan que, aparte de los seis meses reglamentarios, la leche de la progenitora esté presente durante los dos primeros años de vida o más, junto con una alimentación reglamentaria, en la dieta del bebé. Como contrapunto, la dificultad de destetar a los niños según crecen o la dependencia que supone a la madre esta práctica se presentan como objeciones a alargar la lactancia en el tiempo.