Con la llegada del verano, las lentillas son las mejores aliadas al aportar comodidad y una mejor visión, sin suponer un peligro para los deportes. No obstante, estas también pueden convertirse en un foco de infecciones si no se toman las precauciones necesarias.

Por ello, el Colegio de Ópticos-Optometristas de Castilla y León (CCOOCYL) recuerda que aquellos que las usen deben extremar la higiene para reducir la posibilidad de contagio, lavándose y secándose bien las manos antes de tocar las lentes de contacto y los ojos en zonas de baño. Además, según apunta Ana Belén Cisneros, secretaria general del Colegio, "es interesante usar lágrimas artificiales humectantes para hidratar los ojos y evitar la sequedad provocada por el calor y los aires acondicionados".

Entre otros consejos, los ópticos recomiendan limpiar las lentillas todos los días, respetando las pautas de reemplazo correspondientes y sin retirarlas nada más salir del agua, ya que primero deben hidratarse correctamente y recuperar su movilidad completa en el ojo.

El uso de gafas de sol es imprescindible debido a que las lentillas sólo protegen de radiaciones UVA un área reducida de la cornea. Las gafas de buceo también son útiles para evitar irritaciones y picores.