La dieta que tenían nuestros ancestros carece de secretos para los ocho niños que asistieron ayer al taller "Elaboramos nuestra pizza prehistórica", desarrollado en la mañana de ayer por la didáctica del Museo de Zamora.

La actividad, planteada para menores de edades comprendidas entre los seis y los once años, comenzó con una explicación de las características de distintos primates como los Australopithecus, "que vivían en el sur de África en bosques por lo que comían brotes, termitas o gusanos", lo que sorprendió mucho a los asistentes. Entre los datos que les aportó la responsable de didáctica, Lourdes Espinazo, figuran que el Homo Habilis comía carne que conseguía cazando con las herramientas que realizaba con piedra, mientras que el Neanderthal introduce la carne ya cocinada y el Homo Sapiens trabaja la tierra y el ganado con lo que los productos que ingiere se asemejan más a los que actualmente consumidos.

Posteriormente cada menor dibujó una pizza rellena con los alimentos que comían cada uno de los antepasados del hombre.

El taller concluyó con una singular degustación en la que los niños probaron, con los ojos cerrados, distintos alimentos que comían los prehistóricos, pero los gusanos fueron reemplazados por los ricos gusanitos o la carne cruda sustituía por palmar lonchas de jamón de York.

Una manera divertida de aprender en vacaciones en el Museo de Zamora.