La plaza de Viriato, frente al edificio de la Diputación Provincial, fue ayer el lugar elegido para que los zamoranos pudieran mostrar su repulsa ante los atentados de Niza. Más de 150 ciudadanos quisieron acercarse para guardar un simbólico minuto de silencio, tras la llamada de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), que convocó este tipo de actos en todo el territorio nacional al mediodía.

La primera en tomar la palabra fue la presidenta de la Diputación Provincial de Zamora, Mayte Martín Pozo, quien comenzó apenándose de que "una vez más" hubiera que concentrarse para condenar este tipo de atentados. "Lamentablemente, se está convirtiendo en una costumbre el que tengas que volver cada poco tiempo a guardar un minuto de silencio por víctimas que mueren por la sinrazón de este tipo", señaló, para continuar condenando "rotundamente" el atentado y trasmitir las condolencias de la institución provincial a los familiares de los fallecidos "al tiempo que deseamos la pronta recuperación de los heridos".

Martín Pozo deseó para terminar que esta fuera "la última vez" que los zamoranos guardaran un minuto de silencio por este motivo, "aunque puede que, debido a la espiral en la que se están metiendo durante los últimos meses, puede que no sea posible", advirtió.

El alcalde de Zamora, Francisco Guarido, por su parte, señaló que, ante este tipo de atentados, como el sufrido en Francia, "la llamada tiene que ser siempre la misma y constante: la negativa a cualquier acto terrorista y la libertad por encima de todo", subrayó.

Por ese mismo motivo, el alcalde de la capital consideró que ahora es el momento "de tener una unión moral, política y social de todos los grupos en contra del terrorismo y de cualquier acto violento", apuntó sobre la actitud de la sociedad frente a las atrocidades terroristas.

También lamentó, al igual que la presidenta de la Diputación Provincial, que este tipo de sucesos "por desgracia, se vengan repitiendo mucho". Sin embargo, apuntó que este problema "no debe desanimar nunca a las instituciones y a los grupos sociales para seguir convocando este tipo de actos de repulsa del terrorismo siempre que ocurran estas cosas", invitó.

Con un aplauso y caras serias finalizó este acto, que congregó también a representantes de todos los partidos políticos, además de miembros de la institución provincial, Ayuntamiento de Zamora, subdelegación del Gobierno, Junta de Castilla y León y personal del Juzgado de Zamora o la Policía Municipal, entre otros, junto a numerosos funcionarios de la Diputación Provincial.