Perder el miedo a la lírica es el objetivo principal de la primera edición del festival Little Opera, que se celebra del 29 al 31 de julio en diferentes espacios de la ciudad. "Queremos que el público disfrute de la música clásica, una música que a menudo da miedo, parece aburrida y solo entendida por las élites. Nada más alejado de la realidad", animó la concejala de Cultura, María Eugenia Cabezas durante la presentación del festival, al que calificó como "único en Europa", dadas sus características.

Sobre la programación, la directora del festival, Conchi Moyano, miembro de la Asociación Lírica de Zamora (Aliza), impulsora de esta iniciativa musical, apuntó que "aunque las óperas tienen fama de ser muy caras y largas", en esta edición se cambiará de parecer, ya que serán mucho más sencillas de escuchar y su duración no superará la hora.

Sobre los espectáculos, habrá desde estrenos mundiales -como es el caso de la obra "El palacio encantado", de Igor Escudero, en el Castillo e inspirado en una obra de Edgar Allan Poe- hasta representaciones para los más pequeños, como la versión que de "La flauta mágica" de Mozart se podrá disfrutar en el Teatro Elvira Fernández.

Los precios serán totalmente populares y oscilarán entre los 10 y los 12 euros, con la posibilidad de hacerse con un abono de 45 euros que supondrá una rebaja sustancial, además de la posibilidad de participar en la degustación de alimentos de Zamora que se ofrecerá al finalizar la gala lírica de la primera jornada en la plaza de la Catedral.

Otro de los objetivos es el turístico y así lo corroboró el concejal del ramo, quien recordó que este género "siempre estuvo relacionado con el movimiento revolucionario". Este producto es fruto de la creación de nuevas fórmulas para atraer visitantes. "Debemos competir cada vez más con otras ciudades, algo que nos obliga a crear acontecimientos culturales inscritos en programaciones de verano diferentes. Y esta es una original alternativa para atraer nuevo turismo", explicó. Una labor, que lleva "muchos meses" de trabajo y que "no sería posible sin la colaboración de las instituciones", agradeció. A este respecto, dio un pequeño tirón de orejas a la Diputación Provincial de Zamora, que declinó la oferta de colaborar con este proyecto, algo que también recriminó a la institución provincial Conchi Moyano.

Los espectadores podrán disfrutar de los conciertos en diferentes lugares de la ciudad, como la plaza de la Catedral, el Castillo, el Teatro Principal, el Teatro Elvira Fernández e incluso el Consejo Consultivo, que abrirá sus puertas a este evento cultural.

En la presentación también estuvo la directora general de Políticas Culturales de la Junta de Castilla y León, quien alabó esta original propuesta "por su enorme interés turístico y cultural. Es todo un acierto que el Ayuntamiento haya optado por ello, que tan bien llegará a todos los públicos", resumió.

Previo al programa oficial, la Orquesta Sinfónica de Castilla y León estará el jueves 28 en la plaza de la Catedral, "en cuyo concierto hará un pequeño guiño al festival", adelantó María Eugenia Cabezas sobre esta actuación.

Feliciano Ferrero, secretario de la Fundación Caja Rural, otra de las entidades colaboradoras, indicó que estos conciertos "son una forma de desencasillar la ópera de los grandes teatros a las calles" y aprovechó para reivindicar el regreso del Festival Internacional de Canto, que durante tres ediciones, "supuso todo un éxito para la ciudad, llegando a participar más de un centenar de cantantes de todo el mundo en el último certamen", recordó.

Las entradas ya están a la venta en la caseta situada en la plaza de Castilla y León de la capital o a través de la web del festival (www.littleoperazamora.com), diseñada por Clara Labanda, y donde se encuentra toda la información de los espectáculos.