La asociación, DAZ, quiere aprovechar la llegada del verano para seguir concienciando sobre el maltrato animal y, para ello, se ha tirado a la piscina con una idea completamente nueva: la maratón de tatuajes benéficos. El día 31 de julio, la tienda Ariel Tattoo, situada en el barrio de "Los Bloques", decorará la piel con tinta vegetal por 20 euros, donativo que irá íntegro a dos de los casos más graves: un perro con leishmaniosis y una gata que parapléjica debido a un disparo.

La idea nació de los propios tatuadores, quienes llamaron a la asociación deseosos de poder aportar su grano de arena después de intentarlo en la "Marcha contra el abandono" y no poder hacerlo por estar el cartel lleno.

Miriam García, presidenta de DAZ, ve la iniciativa con optimismo: "Ya han llamado bastantes personas para pedir cita. A muchos les apetece hacerse un tatuaje con este tiempo y 20 euros es un precio regalado. Ojalá esta actividad se fidelice y podamos seguir muchos años". La inscripción es sencilla: basta con marcar el número de la tienda, llamar y pedir cita específicamente para ese domingo. "Los tatuadores están sacrificando su único día libre por nosotros, es todo un detalle por su parte", añade la presidenta.

Tratamientos muy caros

Según ADZ, el 60% de los animales que se regalan terminan maltratados, incomprendidos y dejados a su suerte en cualquier esquina. Al estar acostumbrados a la vida doméstica, las enfermedades llegan muy rápido una vez están en la calle. Este es el caso de Ángel, infectado de sarna y leishmaniosis. Su tratamiento, que incluye tres pastillas diarias y un champú especial, cuesta 150 euros al mes, una cantidad que la asociación ve cada vez más difícil de pagar. "Ángel se encuentra cada vez mejor, pero aún necesita las medicinas para curarse por completo", informa Miriam.

La recuperación de Didi requiere más tiempo. Desde que la asociación la recogió de la calle, la gata ya ha asistido a varias sesiones de rehabilitación que le han permitido empezar a mover las patas traseras. Sin embargo, la recuperación es muy lenta y todavía se requieren más sesiones para que recupere la movilidad total.

Falta conciencia

A pesar de la participación activa de los zamoranos en las distintas actividades de la asociación -como la Marcha contra el Abandono, a la que asistieron alrededor de 300 personas el año pasado-, Maria Asunción Fernández, voluntaria de DAZ, opina que todavía queda mucho por hacer. "Tenía que haber más gente involucrada. Todavía existe la creencia equivocada de que los animales son objetos de los que uno se deshace sin más", añade.