Las altas temperaturas, el sol y la mayor actividad de calle que se despliega durante el verano son factores que propician la expansión ciudadana, pero que pueden acarrear también problemas si no se toman precauciones, todas ellas basadas en el sentido común. Por ejemplo, en verano se dan más las picaduras de mosquitos, de garrapatas o de mordeduras de perros, por lo que es conveniente, por ejemplo, usar repelentes de insectos. Tener cuidado al tomar el sol es importante para evitar enfermedades como el cáncer de piel o el melanoma, del que se detectaron el pasado año 37 casos en la provincia, 22 en hombres y 15 en mujeres. Las intoxicaciones alimentarias son más frecuentes porque el calor las favorece, y es importante tener en cuenta que la mayoría se produce en los domicilios particulares, por lo que hay que extremar la precaución. El baño es una actividad placentera pero que también presenta sus riesgos, por lo que es conveniente tomar medidas básicas, como no dejar a los niños en ningún momento sin vigilancia. En Zamora están reconocidas seis zonas de baño, aunque una de ellas, el Lago de Sanabria, con cuatro playas.