La joven investigada por la venta de su bebé zamorano a los quince días haber nacido por una cuantía que podría oscilar entre los 3.000 y 15.000 euros, según testigos, permanece en prisión preventiva y sin fianza, en Pontevedra, después de ser localizada en Oporto y trasladada por la Policía Nacional hasta los juzgados de Tui para prestar declaración.

El Juzgado investiga si el trato se cerró a través de las redes sociales, en concreto de Facebook, a través de cuyas cuentas se comunicaba la madre y la pareja residente en Gales que recibió el niño a los quince días de nacer, lugar en al que viajó la joven con el pequeño.

La acusada, de iniciales I. R. B. y 19 años de edad, negó haber cometido el delito y aseguró que jamás pensó en comerciar con su niño, al que dio a luz el 2 de septiembre de 2015 en el Hospital Virgen de la Concha, si bien personas de su entorno afirmaron haberle oído hablar de sus planes de vender a su hijo, lo que explicaría que se le localizase en una localidad de Gales.

La joven, residente en Zamora pero de nacionalidad rumana, declaró ante el juez de Familia de la capital que nunca tuvo intención de entregar a cambio de dinero a su hijo a la pareja española de 26 años que residía en Cardiff Bay (Reino Unido), donde el bebé permanece bajo la custodia de las autoridades galesas, tras imputar a la madre natural y a la pareja por la compra ilegal del menor.

La detenida explicó al juez su presencia en el Reino Unido porque fue a visitar con su niño a la pareja, conocida a través de las redes sociales, de Facebook, y con la que guardaba ya una amistad. Entonces, decidió dejarle unos días con estos amigos, que también están acusados del delito de recibir al menor de forma ilegal.

Tanto la joven rumana, que tiene antecedentes policiales en Zamora, como los padres "adoptivos" del pequeño se enfrentan hasta a cinco años de prisión y la inhabilitación para ejercer la patria potestad, la tutela, curatela o guarda de un menor por un tiempo que oscila entre los cuatro y los 10 años.

El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 5 de la capital, el que tiene las competencias de Familia, está a la espera de recibir documentación sobre los mensajes que intercambiaron los acusados en Facebook, a fin de conocer el contenido exacto para comprobar si el acuerdo sobre la venta del bebé tuvo lugar a través de esta red social. De hecho, fue a través de ella como entraron en contacto y fueron conociéndose, según confirmaron ambas partes.

El Juzgado de Zamora está a la espera de que se resuelva el conflicto de jurisdicción sobre este caso también investigado por las autoridades jurídicas de Gales para que se decida que órgano judicial es competente para resolverlo, lo que dependerá del lugar dónde se cerró el acuerdo de venta o adopción ilegal, si en España o Reino Unido. El juez zamorano también ha solicitado la repatriación del niño, puesto que es de nacionalidad española, que quedaría bajo tutela de la Junta de Castilla y León al estar su madre imputada.