Cáritas diocesana denuncia que aproximadamente un 40% de los zamoranos está en riesgo de exclusión social a tenor de los datos que maneja apoyados en el índice Arope, tasa de riesgo de pobreza y exclusión social a nivel europeo que permite comparar la situación entre países, y comunicados ayer en la presentación de su informe correspondiente al pasado año.

El delegado episcopal de Cáritas, Antonio Jesús Martín de Lera, esgrime que la cifra de la provincia es "tan alta", la media nacional asciende a un 22,1%, porque "la población está muy envejecida, existe un fuerte despoblamiento, una gran dispersión en el medio rural y las cifras de paro no descienden". El sacerdote subraya que en Zamora "existe el problema de dónde somos capaces de generar trabajo porque nuestros jóvenes se marchan". Añade que es una situación pesimista, pero "no hace falta más que mirar la realidad que tenemos, ¿qué industrias existen?" y enfatiza: "Mientras que no seamos capaces de resolver el problema de dónde y cómo creamos empleo estaremos en riesgo de que la exclusión social sea muy alta". Además, Martín de Lera insiste en que la encuesta de condiciones de vida, publicada hace unos días por el INE, "presenta un panorama muy similar al que conoce Cáritas". "No hay realmente una salida importante de la crisis".

Cáritas diocesana en 2015 atendió a 13.418 personas, aunque los beneficiarios ascendieron a 34.983 individuos con unos recursos de 8.637.347 euros procedente un 29,42% de financiación pública y el resto, 70,58%, de fuentes propias, donantes o usuarios, cifra ligeramente mayor que el pasado año gracias a donativos particulares.

"Notamos que la gente a la que apoyamos sigue en la misma situación e incluso se ha incrementado la cifra de beneficiarios en más de 2.000 personas". El pasado año la entidad destinó 675.738 euros al capítulo de acogida y animación comunitaria, un 7% más que en 2014, de los cuales un 35% correspondió a atender las necesidades básicas de alimentación, farmacia y educación, y 42% al pago de alquileres porque muchos "si pagan no comen y si comen no pagan" y 17% en energía.

El perfil de los usuarios de Cáritas responde a personas de entre 35-57 años, con falta de formación para el empleo por parte de las personas sin trabajo, gastos excesivos en vivienda, desempleo en las personas activas de la familia e incluso "muchas han dejado de comprar medicinas o de seguir tratamientos porque no tienen medios económicos", remarca la directora de Cáritas en Zamora, Mercedes Morán.