Banco Ceiss y la totalidad de la representación legal de los trabajadores alcanzaron un acuerdo en la madrugada del viernes, sujeto a ratificación en las próximas horas, que pone fin al proceso de negociación iniciado el pasado 20 de abril.

El acuerdo contempla la prejubilación de más de la mitad de los afectados por este plan de reestructuración, fijado finalmente en 850 empleados. Además, más de 250 trabajadores podrán ser recolocados en otras empresas del Grupo Unicaja y el resto puede cubrirse con desvinculaciones de carácter voluntario. "De esta forma se ha logrado minimizar el impacto inicial del proceso", apunta la entidad. Cabe recordar que la cifra inicial de despidos estaba establecida en 1.120 personas, una cantidad que ahora se ha visto reducida. Los sindicatos esperan que, sumando las prejubilaciones a las bajas voluntarias se alcance la cifra prevista de 850 trabajadores menos.

Banco Ceiss "quiere destacar que, en virtud del consenso logrado por ambas partes de la negociación, la reducción señalada se producirá de forma escalonada durante los próximos dos años y medio, hasta diciembre de 2018, algo que, sin duda, permitirá atenuar el efecto del proceso".

Con las medidas adoptadas, junto a la recuperación del negocio, "la entidad garantiza la continuidad en la región, ofreciendo el mejor servicio de cercanía y calidad a sus clientes", asegura el propio banco.

Los sindicatos, por su parte, son conscientes de que la cifra de despidos todavía es alta pero se muestran satisfechos tras haber reducido considerablemente el número inicial planteado por la parte empresarial. "La destrucción de empleo existe y siempre es mala, pero consideramos que los acuerdos alcanzados son menos traumáticos que las medidas que proponía la empresa.

Perder el trabajo nunca es una buena noticia, pero es menos mala si las medidas a aplicar han sido negociadas" entre empresa y sindicatos, asegura Luis Miguel Redondo, de Comisiones Obreras.

Como consecuencia de los acuerdos alcanzados la huelga, que iba a comenzar el próximo 30 de mayo, queda oficialmente desconvocada, así como todas las asambleas que los sindicatos iban a celebrar con los trabajadores de la entidad.