Aunque familias y centros escolares han avanzado en cuanto a la sensibilización respecto de los afectados por el Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), lo cierto es que todavía queda camino y se hace necesario dotar a los colegios de un equipo multidisciplinar que ayude a detectarlo y a encaminar la atención del alumnado que lo sufre, ha explicado en Zamora el juez de Menores, el reconocido Emilio Calatayud, quien sostiene que "cada vez veo más chavales empastillados y creo que no hay tantos que tengan que estarlo.
El juez recordó que hay niños "traviesos e inquietos", pero que no todos tienen por qué padecer ese trastorno, "que es un problema y hay que tratarlo, hay que ser sensible, pero no todos los niños revoltosos tienen TDAH".
Calatayud, que cerró la III Semana del TDAH, organizada por la Asociación de Afectados de Zamora (Azadahi), ofreció a una abultado auditorio su visión sobre como "Aprender a ser padres en la sociedad actual", volvió a colocar la clave en la recuperación de la autoridad, como viene advirtiendo hace años, e instó a los padres a perder el miedo a decir "no" a sus hijos porque es necesario frustrarles.
El magistrado subrayó que si la consecuencia inmediata de esa falta de autoridad de los padres es que los profesores también adolezcan de ella. Esto, "unido a las nuevas tecnologías y la información, los teléfonos móviles y los medios de comunicación, "está haciendo mucho daño".
Insistió a los padres para que retrasen lo más posible el uso de los móviles por parte de sus hijos y de Internet sin vigilancia porque ambos están provocando un incremento de delitos entre menores de acoso, bullying, contra la intimidad y el honor, amenazas y agresiones a padres.
Por su parte, la presidenta de Azadahi, Nélida del Estal, pidió más colaboración al profesorado y los centros educativos para evitar etiquetas en los niños afectados por el TDAH, colaboración mutua y sin exigencias por ambas partes.
Al concluir el acto, al que acudió la presidenta de la Diputación Provincial, Mayte Martín Pozo, la Asociación hizo entrega de un diploma al psicólogo que colabora con esta organización, Manuel Rodríguez Becerra, y a Calatayud.
