Los más recientes datos de la Encuesta de Población Activa, que dan a Zamora un total de 16.900 parados y acercan de nuevo a la provincia a la cifra de los 17.000 dejan una clara distribución por sectores que muestra que la economía, lejos de comportarse de manera homogénea entre las distintas áreas de la actividad, cuenta con grandes diferencias dependiendo de si se analizan unos sectores u otros. Los datos detallados de la EPA indican que el sector servicios ha sido, con muchísima diferencia, el que más empleos ha destruido durante los últimos meses. La construcción va también a la baja, aunque con más moderación, mientras que agricultura e industria se muestran alcistas.

Por partes, la sangría laboral vivida en los negocios de hostelería, comercios o, en cualquier caso, empresas del ramo, es digna de subrayar. Según la EPA el sector servicios zamorano ocupa en estos momentos a 41.800 personas. Son muchas, la mayoría de las ocupadas. Pero también son muchas menos de las que había cuando se dio por finalizado al año 2015, cuando la cifra ascendía a 45.400 personas. Son 3.600 menos, una caída muy abultada máxime teniendo en cuenta que la caída de la ocupación global ha afectado a 2.800 personas. De no ser por el contrapunto que han puesto otros sectores, el desplome habría sido todavía más grande.

Junto con el sector servicios, la construcción es la única área de negocios que ha perdido ocupados en el primer trimestre de este año. Zamora tiene en estos momentos cinco mil empleados en este sector por los 5.600 que había registrados cuando finalizó el año. Pero, al contrario de lo que sucede con el sector servicios, que creó mucho empleo durante el año 2015 aunque ahora la cifra se haya reducido, la construcción lleva varios meses en una línea claramente descendente. La construcción nunca ha repuntado si se marca el periodo inicial en el primer trimestre del ejercicio pasado, cuando ocupaba a más de seis mil personas. Los datos de la EPA muestran que la reducción de las obras públicas, que avanzan en su desarrollo, tiene su claro reflejo en los datos de ocupación. La autovía a Benavente era un nicho de empleo para los trabajadores de la construcción y su finalización se produjo el año pasado. Por su parte, las obras del AVE avanzan hacia Galicia y van concluyendo en la provincia, algo que también se nota en las cifras de empleo. Por su parte, la construcción privada no repunta y las empresas del ramo se ven obligadas a "reubicar" sus áreas de negocio hacia las reformas, que movilizan a un número muy inferior de trabajadores.

Sectores como agricultura e industria se mantienen alcistas. Los negocios relacionados con el campo han crecido de manera notable en el último año hasta ocupar ahora a 9.500 zamoranos por los 5.900 de hace justo doce meses. Por su parte, la industria ocupa a 6.900 personas y también muestra una buena tendencia general.