El Consejo de Cuentas ha recomendado a la Junta que retire ayudas y subvenciones a los ayuntamientos que incumplan su obligación legal de presentar la contabilidad, de la misma forma que el Estado les retiene el dinero que les correspondería por la participación en los tributos. Es una de las conclusiones que la institución que preside Jesús Encabo aprobó ayer en Zamora, en el informe específico para conocer las razones por las cuales los ayuntamientos no presentan sus cuentas, situación especialmente relevante en esta provincia, con dos de cada diez pueblos menores de mil habitantes incumplidores, algunos desde el año 2003 como es el caso de Entrala, El Perdigón, Fresno de la Polvorosa y Gallegos del Pan.

La falta de personal es la causa que con más frecuencia se alega en Zamora para justificar el incumplimiento, seguida de la carencia de medios materiales o el retraso en la contabilidad. Sin embargo resulta que un 69,2% de los municipios que no presentan las cuentas sí las tienen hechas y aprobadas y tan sólo les falta el paso de la presentación material. Entre las causas que influyen en los incumplimientos destaca la acumulación de secretarías en un mismo funcionario, por lo que una de las recomendaciones a la Junta es que restrinja esta práctica y defina mejor las agrupaciones de pueblos con un mismo secretario. Sin embargo, las desavenencias políticas o el hecho de que el secretario sea interino no tienen apenas relevancia en la no presentación de las cuentas, indicó Encabo.

Entre las medidas adoptadas por los ayuntamientos para dar solución a los problemas que impiden la rendición de cuentas en Zamora el fundamental es la mejora de medios informáticos y en menor medida se recurre a la ayuda de la Diputación o a la contratación de una empresa externa. En Zamora no hay ningún caso de incumplimiento por falta de conexión a Internet.

Por lo demás los pueblos incumplidores no llevan una mala gestión económica del presupuesto, ya que ejecutaron un 89% de los ingresos y un 80% de los gastos, y terminaron con superávit.

Una última recomendación es la de variar la normativa nacional para que se reduzcan plazos en la aprobación de la cuenta general municipal, con lo que se ganaría en agilidad y transparencia.