La familia del hombre que murió en la calle del Caño de Zamora capital, Julián Esteban Benéitez, y que denunció la denegación de auxilio a la viuda por parte de un establecimiento hostelero próximo, aclara ahora que la mujer, que relató a sus hijas inicialmente que había golpeado en una puerta de cristal, recuerda que también llamó a un interfono, "el malentendido viene de que hay tres portales, de los cuales dos son del hotel, y uno de un edificio de viviendas con la misma estética de inmueble del local", con lo que "fácilmente se puede confundir, dado que es el portal del centro", según se indica en un comunicado conjunto. Ese portal es "el único que tiene interfono y donde la familia confirmó ayer, en conversaciones con el hotel, que la esposa del fallecido había llamado" para pedir que avisaran a una ambulancia porque su marido estaba indispuesto, sentado en las escaleras de la calle mencionada.

La familia del fallecido contactó ayer con el hotel y, "tras visualizar la infraestructura del edificio", pudo observar "cómo y dónde se habían producido los hechos y ver que, efectivamente, cualquier comunicación con el establecimiento fue totalmente imposible desde allí", como en principio se relató a este diario, posiblemente llevados por el estado de shock en el que se hallaban la viuda y sus hijas. Los responsables del hotel y la familia han querido emitir una nota aclaratoria sobre los malos entendidos que hayan podido producirse durante estos días.