La actividad que se genera en el Campus Viriato de Zamora produce un impacto económico para la ciudad que asciende a 59,3 millones de euros al año. Esta cifra se divide entre los gastos del personal docente e investigador y el de administración y servicios (8,7 millones) o el generado por los alumnos (18 millones), el más elevado de las partidas, entre otros, que suman 34 millones de euros correspondientes al impacto primario de la actividad en el campus, al que hay que añadir uno secundario para dar el total anteriormente mencionado. Unos datos que subrayan el valor de contar con un campus en la ciudad, ya que se convierte en un eje fundamental para la economía de Zamora, con ese flujo de capital tan necesario como motor de desarrollo.

La cuantía total en todo el área de la Universidad de Salamanca, que aúna los campus de esa ciudad junto con el de Béjar, Ávila y el Campus Viriato asciende a casi mil millones de euros. Además, de cada euro invertido en la USAL, se genera algo más de seis euros en Castilla y León.

Estos datos se desprenden del estudio "La parte y el todo. El impacto económico de la Universidad de Salamanca", realizado por un equipo de investigadores dirigido por el profesor Rafael Muñoz de Bustillo y que ayer fue presentado en Salamanca.

Trabajo "prudente"

Durante la presentación del estudio, el director apuntó que los datos de este trabajo son bastante "prudentes" al no tener en cuenta "los efectos secundarios" de este impacto económico, como la atracción de empresas o de turismo por la presencia de la universidad en la ciudad. Así, se centra en los efectos de demanda y a corto plazo "que son más directos y mensurables".

Por otra parte, el informe sitúa a la USAL entre las 20 empresas de Castilla y León que cuenta con más de mil trabajadores y apuntó que cuenta con un presupuesto "superior al de la Diputación o el Ayuntamiento de Salamanca". Por ello consideró la universidad como "la mayor industria de las tres provincias", al tiempo que indicó que su impacto económico, ponderado en este estudio, "está por encima de la media de las universidades españolas".

Por su parte, el secretario general de la Consejería de Educación de la Junta de Castilla y León, Juan Casado Canales, reconoció que la solidez de la Universidad de Salamanca, "se demuestra con este estudio" y recordó que la USAL "es una administración pública saneada económicamente, algo vital para seguir avanzando". Por último, animó a que se aprovechara la próxima celebración del octavo centenario de esta universidad "para reflexionar sobre el futuro del sistema educativo público, donde la USAL debería tener un papel esencial por su gran importancia".

En el acto estuvo también presente el rector de la Universidad de Salamanca, Daniel Hernández Ruipérez, quien apuntó que "no habrá tantos campos en los que el estímulo directo de la administración pública produzca tantos resultados", por lo que subrayó que invertir en la universidad "es un gran negocio" ya que ese dinero invertido por la administración pública "tiene un gran retorno, como lo demuestra este informe". Por último, apuntó que "la universidad es el principal ascensor social y eso es algo que no hay que olvidar".