Instituciones y organizaciones empresariales reclamaron la implicación de Renfe en el desarrollo de suelo industrial, con una idea clara: dar un uso a los miles de metros cuadrados abandonados que hay en el entorno de la estación y que pueden suponer una oportunidad de oro para desarrollar industria, dada la cercanía con Madrid. La presidenta de la Diputación hacía un llamamiento en este sentido al tejido empresarial zamorano, que contará con su apoyo para este tipo de iniciativas. El alcalde, Francisco Guarido, también promete trabajar en este sentido, aunque constata cómo Renfe se remite a ADIF para estas cuestiones. Y los empresarios, como la Cámara de Comercio y la CEOE incidieron en la necesidad de que los terrenos de Renfe industrial y residencial reviertan a Zamora para crear un polígono de industrias tipo, por ejemplo, tecnológicas, que tendrían ventajas competitivas muy importantes si se instalarán en la capital zamorana, pero a tan solo hora y media del centro de Madrid. Este aspecto se uniría al turístico, que es el que parece más avanzado con el trabajo de Diputación y Junta con Renfe cara a eventos como la Semana Santa o las Edades del Hombre en Toro.

La Cámara de Comercio puso además el acento en mantener la vía convencional, actualmente utilizada tan solo por un tren diario en cada sentido hasta Medina del Campo y el establecimiento de una plataforma logística que aproveche esta infraestructura para enviar mercancías, fundamentalmente graneles a los puertos del norte. En caso de no encontrar uso para mercancías, la Cámara teme que la vía convencional esté abocada a la desaparición en cuanto se finalice el AVE hasta Galicia. Pidió también que se mantenga el Trenhotel, que era muy utilizado desde Galicia.