El 40% de los médicos de familia de la Comunidad, es decir, cuatro de cada diez, se jubilará en los próximos cinco años, según se desprende de los datos de un estudio realizado por el zamorano Hermenegildo Marcos, que es vocal de Atención Primaria Rural del Consejo de Colegios de Médicos de Castilla y León y José Luis Garavís, que ocupa el mismo puesto en Salamanca. En Zamora puede estar en torno al 30% los médicos en edad de jubilarse en los próximos cinco años, explica Marcos, si bien es difícil de controlar cuántos podrían reengancharse hasta más allá de la edad de los 65 años, una vez que Sacyl parece haber suavizado los impedimentos que durante algunos años ponía a los profesionales que querían prolongar la edad laboral.

La situación es preocupante porque "apenas hay médicos en las bolsas de trabajo temporal y los MIR de Familia que en este momento se están formando en nuestra Comunidad, aun quedándose todos en nuestra comunidad al finalizar su formación, cosa que no está ocurriendo, son claramente insuficientes para cubrir las vacantes que se producirán por jubilaciones", indican los autores del trabajo.

El estudio constata el alto porcentaje de interinidades, que ronda el 43%. Y en cuanto a sustituciones de las ausencias en puestos de trabajo, por diversos motivos, los planteamientos de las gerencias son dispares con gran variabilidad en los criterios y en el número de días que son sustituidos, que en el mejor de los casos se acerca al 40 % y en el peor cuatro días al año por profesional. El doctor Marcos explica que en Zamora la media arroja que cada doctor realiza entre 2,8 y 3 acumulaciones de cupos de algún compañero cada mes. "De media, porque hay consultas en verano que pueden llegar a acumular hasta 15 y 20 días". El doctor constata cómo es la comprensión de los pacientes y el esfuerzo de los profesionales los que permiten mantener la asistencia en unas condiciones que no son las ideales, ya que cuando se acumulan cupos se suelen cambiar horarios y no es lo mejor que cada día visite un médico distinto al paciente. Hermenegildo Marcos indica que, aunque en frecuentación (número de pacientes por consulta) las cifras de Zamora no son demasiado malas, hay que tener en cuenta factores como el envejecimiento de la población o la dispersión.

Por otra parte, el estudio cifra en más de un 30% la pérdida de poder adquisitivo de los médicos, entre recortes salariales, incremento de impuestos e inflación.

Los médicos constatan que siguen dándose muchos problemas con el programa Medora que es fundamental para el funcionamiento de las consultas. Dificultades que se están dando también para poder aplicar la receta electrónica que se están intentado implantar en toda la provincia.