Los vecinos de municipios transfronterizos de Zamora, además de otros de España y Portugal, reclaman la supresión del sobrecoste de las llamadas de teléfono por "roaming", la tarifa que los operadores cobran por el uso del móvil desde un país extranjero. Los ciudadanos de las localidades limítrofes de La Raya conviven con un servicio que en ocasiones salta a la cobertura de un operador extranjero, lo que incrementa el coste del móvil a pesar de la rebaja de las tarifas. El fin de la invasión involuntaria de redes de telefonía del país vecino tendrá que esperar, según las previsiones, hasta el próximo año debido a la presión de las operadoras, ya que la Eurocámara fijó en un principio la supresión del roaming para diciembre del pasado año.

El asunto fue abordado en el encuentro transfronterizo de centros de información europea celebrado en la Fundación Rei Afonso Henriques, en el que participaron responsables de los Puntos de Información Europea de Orense, Ponte de Lima, Braganza, Zamora, Fundão, Salamanca, Cáceres, Castelo Branco, Elvas, Olivenza, Faro y Huelva.

Aunque los puntos Europe Direct tienen como objetivo informar sobre las políticas en general de la UE, es en la frontera donde queda patente la necesidad de instrumentos europeos para transacciones diarias económicas, sociales o culturales. Uno de los ejemplos traídos a colación es el flujo de estudiantes de Enfermería de Braganza a la Escuela de Enfermería de Zamora a través de las becas Erasmus o el poder ejercer de autónomo a los dos lados de la frontera con la directiva de servicios europea, e incluso el uso de la tarjeta sanitaria europea como instrumento para consultas médicas.

La armonización fiscal fue otro de los temas abordados en Zamora, sobre todo, lo relativo al buen funcionamiento del mercado único, es decir, garantizar que los ciudadanos y las empresas no tengan que enfrentarse a obstáculos relacionados con las actividades económicas transfronterizas. La jornada sirvió también para abordar la idoneidad del pago de los peajes en territorio luso, que en algunos casos rozan la infracción con políticas comunitarias de libre circulación europea. La incomodidad del pago y solicitudes de información que reciben los centros europeos, incluido el de Zamora, reflejan que "el sistema no es muy eficiente", reconocen los responsables de los puntos informativos.